Un gol de campo de Shaun Suisham de 41 yardas en el último aliento le dio ayer a los Steelers de Pittsburgh la victoria 30-27 ante los Browns de Cleveland.
Los Steelers dilapidaron una ventaja de 24 puntos al descanso, con una reacción de los Browns orquestada por su quarterback Brian Hoyer.
Pero salieron triunfantes gracias a las buenas jugadas de su mariscal de campo Ben Roethlisberger y el wide receiver Markus Wheaton.
Roethlisberger conectó un par de pases con Wheaton en la posesión decisiva, incluyendo uno envío de 20 yardas que dejó a Suisham en buena posición para propinarle a los Browns su décima derrota seguida en la primera fecha de la temporada.
Roethlisberger acumuló 365 yardas y un pase de touchdown por Pittsburgh, además de una intercepción.
Hoyer lanzó para 230 yardas y una anotación, un desempeño que deberá consolidarle como titular sobre el novato Johnny Manziel.
En las estadísticas fue un juego parejo, pero la experiencia de los Acereros y en especial de “Big Ben” influyó como el factor determinante para que los Acereros, con un inicio de campaña terrible el año pasado, lograran su primer triunfo.

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