Desmantelan dos narcolaboratorios en la León-San Felipe

Militares desmantelaron dos narcolaboratorios en dos comunidades cercanas a la carretera León-San Felipe.
En dos cuartos de lámina y madera había barriles con ácidos, tanques de gas, reactores y otros artículos usados en la fabricación de droga sintética.
No hubo detenidos, al parecer los encargados del lugar escaparon cuando vieron que se acercaban los soldados.
Los narcolaboratorios en las comunidades de León fueron descubiertos por los soldados en recorridos por zonas serranas.
Se dijo que el lunes ya se habían localizado ambos, uno en la comunidad Barbosa y a cinco minutos de distancia se encontró el otro, en El Capulín.
La mañana de ayer los efectivos del Ejército bajaron por veredas hasta Barbosa.
En la parte trasera de la finca estaba el cuarto improvisado con madera y láminas, de cuatro metros de ancho y 15 de largo.
A un lado había una fosa donde presuntamente se tiraban los residuos de la droga que al parecer se fabricaba en el lugar.
En ese cuarto había cinco ollas de desperdicio químico, dos cilindros de gas de 30 kilos, un tanque de oxígeno de 25 kilos, un reactor con capacidad de 40 kilos, dos secadoras con capacidad de cinco kilos y dos quemadores.
Además se encontraron más de una decena de contenedores con químicos usados en la producción de droga cristal.
También había tres costales de sosa cáustica de 25 kilos cada uno y varios artículos de protección personal, como guantes y tapabocas.
Los altos mandos del Ejército comunicaron el hallazgo a la Procuraduría General de la República (PGR) y momentos después acudió personal del Ministerio Público Federal.
Los agentes recopilaron evidencias para integrar la averiguación previa.
Posteriormente sacaron los químicos y materiales del cuarto y los trasladaron a las oficinas de la PGR en León.
El lugar fue destruido a mano y finalmente incinerado.
Los soldados acudieron luego a la comunidad El Capulín, a unos cinco minutos de Barbosa.
Ahí se encontró otro laboratorio con las mismas características, pero más grande.
Había ocho reactores para “cocinar” la droga.
Las autoridades también encontraron varios litros de químicos para fabricar drogas, así como un plantío de marihuana de 15 metros cuadrados que al parecer era para uso personal de los delincuentes, según los investigadores.
Oculta bajo ramas y hojas estaba escondida una camioneta Ford.
Peritos del Ministerio Público llevaron a cabo las averiguaciones correspondientes y los soldados se encargaron de destruir el inmueble.
Se espera que en los próximos días las autoridades informen detalles del desmantelamiento de la narco cocina.