En una orden que incluye firmes restricciones para las tropas de EU que regresan de África occidental, el secretario de Defensa Chuck Hagel dijo que los militares que ayudan a combatir el ébola deben someterse a una cuarentena de 21 días al regresar, un periodo más largo que el que se exige para muchos trabajadores de salud civiles.
Entretanto, en Maine, una enfermera civil se resistía airadamente a la cuarentena a la que le ordenaron someterse.
Kaci Hickox, que había atendido a pacientes de ébola en África, dijo que planeaba dejar la cuarentena que seguía en su casa, lo que la encamina a un posible enfrentamiento con la Policía que vigila sus movimientos y los funcionarios de Maine que se preparan para hacer cumplir la orden.
Las fuerzas armadas de EU tienen cerca de mil soldados en ese país y poco más de 100 en Senegal apoyando los esfuerzos para combatir el virus.
El total podría crecer hasta 3 mil 900 según los planes actuales, aunque no se prevé que ninguno de ellos esté en contacto con pacientes de ébola.
Al anunciar su decisión en Washington, Hagel dijo: “Esta también es una política que se analizó en gran detalle con las comunidades, con las familias de nuestros hombres y mujeres militares, y ellos querían una válvula de seguridad en esto”.
BITÁCORA
ENFERMEDAD MORAL
Bajan infecciones: La OMS dijo que la tasa de nuevas infecciones en Liberia parecía disminuir, aunque advirtió que aún falta mucho para controlar la epidemia.
Piden recursos: La organización Médicos Sin Fronteras declaró “absolutamente desbordada” ante la “catastrófica” epidemia y pidió a los ciudadanos 11 millones de euros para poder seguir atendiendo a los nuevos enfermos.
Declara alerta: Panamá anunció una alerta preventiva que incluye un monitoreo permanente en todo el País ante la amenaza del ébola y restringió, desde hace una semana, el ingreso de pasajeros procedentes de África occidental