La integración de tres nuevos volúmenes destinados como áreas de esparcimiento que ahora también favorecen el trabajo y la expresión artística de sus propietarios fue una de las principales características que tuvo la ampliación trasera de una residencia en Estados Unidos.
Localizada sobre un angosto terreno de San Francisco, California, este proyecto a cargo del despacho FORM 4 Architecture dota al hogar con ambientes estéticos que engrandecen sus 31 años de existencia y le dan un aire contemporáneo.
“A diferencia de la estructura original, la nueva adición de 130 metros cuadrados no es visible desde la calle, pero ahora constituye la fachada principal”, comentó John Marx, uno de los principales arquitectos a cargo de la obra.
Y es gracias a esta implementación como el garage se abre hacia un estudio que, a su vez, también conecta con un jardín en pendiente, mientras que en el segundo nivel un área destinada a la pintura y la práctica de yoga complementa un salón en la casa original.
No obstante, la cocina y el comedor cuentan ahora con una zona adicional de trabajo y de entretenimiento en el piso más alto, explotando al máximo los espacios.
El nuevo espacio figura como un recinto donde los dos habitantes realizan sus obras de arte de manera privada y en la parte frontal -con vista hacia la calle- alberga las actividades cotidianas.
Referentes del diseño
De acuerdo con el arquitecto Marx, la propuesta simboliza una linealidad arquitectónica rica en referentes culturales.
Y es que los trabajos artísticos del diseñador Gerrit Rietveld, el pintor Piet Mondrian, y el movimiento De Stijl inspiraron la composición volumétrica y los detalles coloridos que lucen en las ventanas, así como la integración total del interiorismo.
Chispazos de color, formas atrevidas y otros patrones lucen en todos los ambientes a través del mobiliario y su amplia gama de estilos, mientras que los muros de acento y materiales como la madera generan contrastes
armoniosos.
Durante el día, la mayor parte de la iluminación proviene de los amplios ventanales y, por la noche, dispositivos de iluminación LED empotrados enfatizan los matices, las formas y las texturas.
“El uso de vidrio dicroico fomenta una búsqueda más amplia de la vitalidad óptica. Audaces colores primarios se repiten en brillantes superficies y en las dos principales mesas de trabajo”, detalló el artífice.
Asimismo, el creativo añadió que el arquitecto Richard Meier y su particular estilo influyeron en la fachada. Stucco y aluminio corrugado fueron los materiales elegidos para engendrar una imagen minimalista y contemporánea.