Sin control alguno se comercializan computadoras laptop y teléfonos celulares en casas de empeño y en bazares de la ciudad.
A pesar de que hay casas de empeño que cobran el 16% mensual por préstamos fáciles, basta llevar el aparato sin factura.
Pero cuando las computadoras y celulares no son aceptadas en las casas de empeño, los bazares se convierten en otra buena opción para facilitar a quienes quieren empeñar o vender objetos robados, pues allí ni identificación piden.
“Nosotros las recibimos de buena fe. Suponemos que no son robados. Y cada quien pone el precio en base a la página de Internet de “Mercado Libre”, dijo Carlos Andrade, empleado de una casa de empeño.
La Profeco y la Condusef pueden sancionar a estos negocios por cobrar altas tasas de interés, pero no por su operación.
Los legisladores locales aprobaron apenas hace dos semanas una ley para regular la compra y venta de artículos en estos establecimientos.
Sin embargo, entrará en vigor hasta enero de 2015.
Compransin factura
Prolifera la comercialización de computadoras laptop en casas de empeño y en bazares de la ciudad.
A pesar de que hay casas de empeño que cobran el 16 por ciento mensual por ‘préstamos fáciles’, basta llevar el aparato, sin factura, y en algunos establecimientos ni identificación del pignorante solicitan.
Son las computadoras portátiles laptop, esas que roban en los asaltos, junto con los celulares, los artículos que más empeñan, a tal grado que en muchas casas de empeño de plano ya no las aceptan.
“Ya no aceptamos computadoras. Estamos llenos de estos aparatos. Aceptamos mejor electrodomésticos, son de más fácil comercialización”, dijo una de los dependientes de la casa de empeño denominada ‘Mac´s’, que se localiza en la avenida Miguel Alemán, casi esquina con Álvaro Obregón, donde cobran el 14 por ciento mensual por empeño.
En la casa de empeño, ‘Apoyo Fácil’, donde cobran el 11.3% mensual de interés, ya de plano no reciben computadoras, ni ningún aparato electrónico.
“Sólo pedíamos identificación cuando empeñaban una computadora o cualquier aparato eléctrico. Sólo en teléfonos celulares que se bloquean pedíamos factura. Esto es sólo para protegernos en caso de que los reclamen por robo, pues se dan casos que los mismos propietarios los empeñan y luego los reportan como robados a las compañías”, aseveró Rafael, uno de los propietarios.
La casa de empeño que más cobra interés es la ‘First Cash’. Una tasa de interés del 16 por ciento en aparatos eléctricos (un 192 por ciento anual), incluidas computadoras, y un 14 por ciento en joyería.
“Es una tasa de interés muy alta teniendo en cuenta que la tasa en tarjeta de crédito de Banco Azteca, el día de ayer, era del 37 por ciento anual, es decir, un 3 por ciento mensual, y de un 2 por ciento mensual que cobra el Nacional Monte de Piedad”, dijo uno de los ejecutivos de Banco Azteca.
Cuando las computadoras y celulares no son aceptadas en las casas de empeño, los bazares se convierten en una opción para quienes quieren empeñar o vender objetos robados, pues ahí ni identificación piden.
“Nosotros las recibimos de buena fe. Suponemos que no son robados. Y cada quien pone el precio en base a la página de internet ‘Mercado Libre’, o bien en los precios de artículos nuevos. Se ofrece un 30 ó 40 por ciento de su valor”, aseguró Carlos Andrade, empleado de un bazar.
Sin embargo lo que ofrecen por una laptop o un celular está muy por debajo de su valor real.
Y para muestra ‘un botón’
Un claro ejemplo fue un sencillo ejercicio de AM. Un celular de la marca Motorola, con tecnología de punta, que la compañía Telcel tiene valorado en 12 mil pesos, en la casa de empeño ‘Empeño Fácil’, afiliada a Ezapawn USA, se ofreció en compra sólo 1 mil 700 pesos y empeñado sólo 1 mil 400 pesos.
La cosa estuvo peor en otros negocios donde se ofreció sólo $1 mil 200 a la compra, y en los bazares no pasó de 800 pesos.
“Sólo buscamos que los aparatos no estén maltratados. Los compramos de buena fe”, señala uno de los comerciantes.
Luego se hizo el ejercicio con una laptop marca Acer con un valor superior a los 6 mil pesos.
El proceso de empeño es muy sencillo. Sólo llega y muestra el aparato. Y en menos de 5 minutos le dicen que el préstamo es de 900 pesos, en ‘Empeño Fácil’.
Argumenta el dependiente que el mercado está muy saturado y que hay mucha oferta en aparadores.
A la venta y sin supervisión
En la avenida Miguel Alemán, entre la calle Belisario Domínguez y Blvd. Mariano Escobedo se pudieron contar 24 establecimientos, entre bazares y casas de empeño donde compran joyas, computadoras y celulares sin pedir ningún documento, ni identificación.
Sólo en contados establecimientos se exhiben los Contratos de Adhesión registrados ante Profeco.
Se pueden encontrar computadoras y celulares usados o robados, en vitrinas, en la misma banqueta, ante la mirada de clientes y de las mismas autoridades.
“Es un mercado libre. Sin temor a equivocarme creo que más de un 95 por ciento de estos aparatos no tienen factura”, señala uno de los vendedores a quien se le preguntó si vendía una computadora con factura.
Profeco sí puede sancionar por abuso
La Profeco obliga a casas de empeño a proporcionar información sobre requisitos y tasas de interés, pero pocos establecimientos la muestran al público.
Uno de esos establecimientos es ‘Apoyo Fácil’ donde señala como requisito para empeñar identificación oficial vigente. En algunos casos se solicita adicionar factura para teléfonos smartphone, latptop, etc.
También establece que recibirán sólo dispositivos de audio portátiles sólo originales, pues se argumenta que hay muchos ‘piratas’, además de latptop sólo con cargadores originales.
También se exhibe que la tasa de interés mensual es de un 3 %, más un 2 % de costos de almacenamiento, más un 4.5% de gastos administrativos y el costo anual total (CAT) es del 114%, más 35% de comisión de venta y 15 pesos de gastos de operación.
En la delegación Profeco se informó que no hay un padrón de casas de empeño.
“Quien realiza el registro a nivel nacional es la Dirección General de Contratos, Registros y Autofinanciamiento, en nuestras oficinas centrales”, se informó.
A pesar de que desde el 2007 todas tienen la obligación de registrar ante Profeco los Contratos de Adhesión, son pocas las que lo han hecho.
Sólo para tener una idea del número de casas de empeño que hay, en el 2012 la Profeco verificó 42 establecimientos, de las cuales 19 fueron sancionadas por no contar con el Contrato de Adhesión.
Desde el 2007, según de informó en Profeco, se hicieron modificaciones a la Ley Federal del Consumidor para aplicar sanciones con el fin de evitar abusos contra los ciudadanos, por tasas de interés de casi un 200 por ciento anual.
En la reforma de Ley se contempla que la Profeco podrá aplicar sanciones hasta 2.4 millones de pesos contra casas de empeño por abusos.
Cobran interés caro
El delegado en Guanajuato de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), Vicente López Portillo Covarrubias, dijo que lamentablemente no hay una Ley que fije una tasa tope a las tasas de interés que cobran las casas de empeño prendaria.
Será hasta que entre la nueva Ley Estatal la que regulará a estos establecimientos, podrá ser un freno para la compra de objetos robados.
El funcionario destacó que es la Profeco la que controla las casas de empeño prendaria, pues estas tienen que registrar los Contratos de Adhesión, pero que no hay quien regule las altas tasas de intereses que cobran por mes.
“Hay casas de empeño que te cobran más del 100 por ciento de lo que te prestan. Una que cobra el 16 por ciento, te llega a cobrar el 192 por ciento anual de interés. Por ello es importante antes de solicitar un crédito prendario comparar”, dijo López Portillo.
Los intereses que hay en el mercado suelen ser muy caros. Este crédito debe ser la última alternativa para una persona. A nivel de instituciones de Banca Múltiple y Casas de Empeño, en México las casas de empeño no están reguladas por Ley o no tienen un tope en la tasa de interés que cobran, pueden cobrar la tasa que ellos quieran y eso se regula por el mercado, y ese mercado por el alto riesgo que hay suele ser muy caro”, añadió el delegado.
López Portillo Covarrubias apuntó que con el nuevo proyecto de Ley del Congreso Local para regular las casas de empeño será una buena herramienta para controlar la compra de objetos robados en estos establecimientos, pues tendrán que tener un registro y que se verifique que los objetos no sean robados.
“De hecho ya se llevan a cabo operativos de la Procuraduría. Pero históricamente las casas de empeño han cobrado intereses altos, y el argumento que dan es que tienen alto riesgo, pues hay mucha gente que ya no paga y las tasas altas son para recuperar algo para los costos administrativos. Pero hay gente que sí requiere un crédito urgente y tiene que pagar tasas altas y eso hace un hueco a sus finanzas personales”, añadió.
Regularán negocios… hasta enero
A partir de enero del próximo año, las casas de empeño del estado deberán adecuarse a las nuevas normas que establece la Ley que regula las Bases para la Instalación y Funcionamiento de las Casas de Empeño en Guanajuato, entre las que se contempla que los propietarios de estos negocios rindan informes mensuales sobre los objetos que ingresan a la Procuraduría de Justicia.
La legislación recién aprobada por el Congreso local y planteada por el grupo parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN) establece que a partir del próximo año, estos establecimientos deberán tramitar un permiso ante la Secretaría de Desarrollo Económico y Sustentable, el cual no tendrá costo.
Esta idea tiene el objetivo fundamental de establecer un padrón sobre el número de casas de empeño que existen en el estado, pues hasta 2010 el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) había contabilizado 300 de estos negocios en la entidad.
“Al hacer todo un proceso para hacer esta Ley, al hacer toda una investigación, buscar datos certeros que permitieran fundamentar la exposición de motivos de nuestra iniciativa encontramos que no había con certeza un número de este tipo de establecimientos”, recordó el diputado Alfonso Ruiz Chico.
“Lo primero es saber cuántos establecimientos hay, porque si no se sabe cuántos hay, cómo vamos a tener esa supervisión; entonces vamos por orden, saber cuántos están operando, hacerlos entrar en una formalidad, establecer los acuerdos de verificación y de supervisión y bien de la obligación de rendir los informes mensuales a la Procuraduría de Justicia”, subrayó.
Indicó que la primera facultad que la normatividad da a la Secretaría de Desarrollo Económico y Sustentable es de informar a los propietarios de casas de empeño sobre las obligaciones que tendrán a partir del próximo año.
A partir de enero, la dependencia estatal deberá trabajar en la expedición de los permisos, para luego proceder a las verificaciones, las cuales podrá realizar la misma Secretaría o podrá delegar esta responsabilidad en el Ayuntamiento del municipio del que se trate.
Aquellos negocios que no tramiten su permiso serán sujetos a multas o incluso a la clausura.
Es decir que a partir de 2015, las casas de empeño deberán contar con sus permisos federales, con el requisito del estado ante la Secretaría de Desarrollo Económico y los permisos municipales, entre ellos el de uso de suelo.