Como cada 2 de noviembre, centenares de personas acudieronn al cementerio para visitar a sus familiares que han dejado este mundo terrenal, ya que es el día en que se celebra a los difuntos.
El señor Adolfo Martínez Flores era un médico veterinario que falleció el 26 de febrero del 2013, su hijo y su nieto ambos con el mismo nombre del difunto acudieron al mausoleo para dejarle una ofrenda.
En ocasiones a las personas se les dificulta visitar con frecuencia a sus seres queridos difuntos ya sea por cuestiones de tiempo o distancia y esta una de las fechas en las que aprovechan para hacerlo.
“La última vez que vine a la cripta de mi padre fue en febrero de este año, había sido un año que había fallecido, no es excusa pero no vengo tan seguido porque vivo en México y son 5 horas de camino”, comentó Adolfo Martínez hijo.
Él y su pequeño hijo se acercaron a la cripta donde están los restos del señor Adolfo Martínez para dejarle una ofrenda floral, un refresco y un cigarro.
Además platicó que el refresco negro era su favorito y por eso decidió dejarle uno para que su espíritu pueda disfrutarlo.
El entrevistado también señaló que es el día en que los comerciantes hacen su agosto con el precio de las cosas, “Todo lo que venden a las afueras del panteón está carísimo, las flores, la fruta y hasta el agua”, comentó.
“Yo buscaba alcatraces porque eran sus flores favoritas, pero no encontré y tuve que comprarle de otro tipo de flores, lo importante es estar un ratito con él y recordar los buenos tiempos cuando él aún estaba con nosotros”, aseguró Adolfo Martínez C.
Visitó la cripta de su padre
Como cada 2 de noviembre, centenares de personas acudieron al cementerio para visitar a sus familiares que han dejado este mundo terrenal, ya que es e