Para los aficionados que siguen con la herida abierta por aquello del “no era penal” en el Mundial de Brasil, hay una situación curiosa que puede saciar su sed de revancha: Holanda la ha pasado mal desde que eliminó a México en octavos de final, en una especie de “maldición azteca”. Y para colmo, su siguiente juego es un amistoso ante el Tri, que podría acabarle de dar la puntilla a La Naranja Mecánica.
El equipo del ahora odiado Arjen Robben acumula sólo dos triunfos en tiempo reglamentario en los siete partidos que ha disputado después del duelo mundialista ante la tropa azteca.
Además, el delantero Robben siente que los árbitros de la Bundesliga lo etiquetan de tramposo, pues se ha dado cuenta de que ya no le marcan penal desde que fingió la falta que derivó en la pena máxima con la que los holandeses eliminaron al combinado mexicano de la pasada Copa del Mundo.
En tierras brasileñas, la selección de Holanda, aún bajo el mando de Louis Van Gaal, empató sin goles ante Costa Rica, a la que venció en penales. Ante Argentina obtuvo otro 0-0 en los 90 minutos y sucumbió desde los once pasos. Después ganó a Brasil el tercer lugar de la magna cita futbolera.
Ya con Guus Hiddink en el banquillo, el representativo holandés cayó ante Italia en un amistoso (2-0) y en las eliminatorias de la Eurocopa apenas registra tres puntos en igual número de partidos, al tropezar ante República Checa (2-1) e Islandia (2-0) y vencer a Kazajistán (3-1), por lo que puso en riesgo su calificación.
La suma de las tres derrotas en sus primeros partidos coloca a Hiddink con el rendimiento más bajo de los últimos cinco estrategas holandeses, además de la ofensiva más floja, con sólo cuatro tantos conseguidos.
Tan sólo basta recordar que su antecesor, Van Gaal, sumaba esas cuatro dianas en sus primeros dos partidos al frente de Holanda. Bert Van Marwijk, quien dirigió de 2008 a 2012, acumulaba siete anotaciones en sus dos primeros duelos, por ejemplo.
Holanda también se ha vuelto presa de rivales que jamás lo habían vencido, como Islandia, que tenía una marca de nueve derrotas, un empate y cero triunfos ante la Orange.
En dicho partido de las eliminatorias de la Eurocopa, Robben falló un gol de manera increíble. Ganó en las alturas un centro preciso de Daley Blind, pero su cabezazo pasó a centímetros del arco de los islandeses.
Además, el delantero del Bayern Múnich carga con un karma: desde que fingió la falta ante México en el Mundial, los silbantes ya no le marcan penal en la Bundesliga.
Así habló el artillero holandés sobre las consecuencias de su clavado: “Cometí un error en la Copa del Mundo. Lo admito. Pero ahora los árbitros están castigándome por aquello”.
Sufre Holanda “maldición azteca”
Holanda la ha pasado mal desde que eliminó a México en octavos de final, en una especie de “maldición azteca”.