¡Aguas con el monóxido!

La intoxicación por monóxido de carbono, es uno de los accidentes que se puede presentar durante la temporada de invierno, por lo que la Secretaría de Salud en Michoacán (SSM) hace un llamado a la población para evitar el uso de fogones y braceros en espacios cerrados como cuartos o cocinas.
Los síntomas más comunes de intoxicación por monóxido de carbono son: dolor de cabeza, mareo, debilidad, náusea, vómito, dolor de pecho y confusión; ante cualquiera de estas señales es indispensable salir de la habitación, dejándola lo más ventilada posible y acudir a la Unidad de Salud más cerca para recibir el tratamiento adecuado.
En casos severos, la inhalación de altos niveles de monóxido de carbono puede producir desmayo, daño cerebral, caer en estado de coma y hasta la muerte. Debido a que los síntomas son durante el sueño y pueden pasar inadvertidos.
En el hogar, las fuentes de monóxido de carbono más frecuentes son combustión en gas, petróleo, leña, estufas, calentadores de agua (boiler de gas o leña), anafres, chimeneas y lámparas (de gasolina, de gas LP o petróleo).
Sobre todo, el peligro se presenta cuando se encuentran espacios cerrados o sin una ventilación adecuada, por ello se insiste en no emplear estas fuentes de combustión en sitios sin ventilación y no dejarlas encendidas mientras se duerme, ya que esto puede ocasionar hasta la muerte.