El Papa Francisco recibió este fin de semana a un transgénero después de que éste se pusiera en contacto con el Sumo Pontífice para pedirle apoyo ante el rechazo y la incomprensión que sufre a causa de su cambio de sexo, según publicó el diario Hoy de Extremadura y confirmaron fuentes del Obispado de Plasencia.
El encuentro, del que no hay imágenes porque fue una audiencia privada en la residencia papal de Santa Marta, se produjo después de que el español Diego Neria Lejárraga, creyente desde niño y católico practicante, enviara una misiva al Papa en la que le contaba el rechazo que sufrió en Plasencia (Cáceres) a la que regresó tras cambiar de genero.
Neria Lejárraga nació mujer pero siempre se sintió varón, según detalló al diario. “Mi cárcel era mi propio cuerpo”, recuerda. De niño, escribía cartas a los Reyes Magos en las que les pedía que lo convirtieran en varón.
Siempre contó con el apoyo de su familia, pero su mamá le pidió que no se operara mientras ella viviera, según detalla la agencia italiana ANSA.
A los 40 años, un año después de la muerte de su mamá, decidió ponerse en manos de una cirujana plástica y, poco a poco, comenzó a cambiar su cuerpo, por lo que se trasladó a Madrid.
Cuando regresó a Plasencia, su aspecto físico había cambiado y se encontró con el rechazo de parte de su entorno. Lo que más le dolía era la actitud de los creyentes.
“¿Cómo te atreves a entrar aquí con tu condición? No eres digno”, le dijeron algunos católicos cuando Diego quiso volver a su iglesia. “Eres la hija del diablo”, dice que escuchó un día en plena calle de boca de un sacerdote.
Neria se encerraba en casa a llorar y decidió a escribir al Papa, según relata el diario. “Nunca antes me hubiera atrevido (a pedirle ayuda a un Papa), pero con Francisco sí; después de oírlo en muchas intervenciones, sentí que él me escucharía”, confiesa.
Mandó la carta a través del obispo de Plasencia, Amadeo Rodríguez Magro. Tras recibir su carta, Su Santidad le telefoneó a finales del año pasado. La llamada era de un número oculto y, aunque Diego no suele contestarlo cuando esto ocurre, esta vez sí lo hizo.
“Soy el Papa Francisco”, fue lo primero que le dijo, para añadir que sus palabras le habían “llegado al alma” y que quería conocerlo. Poco antes de Navidad volvió a llamarló para fijar la fecha del 24 de enero.
Lejárraga asistió al encuentro con el Pontífice acompañado de su prometida en una reunión privada que tuvo lugar el pasado sábado. Durante su charla, preguntó al Santo Padre “si había lugar” para él en la casa de Dios.
La respuesta de Francisco fue abrazarlo, según revela el rotativo. “Si yo hubiera podido elegir, no habría elegido mi vida”, se lamentó.
Apoyan mormones a gays
Líderes de iglesias mormonas llamaron a tener “un enfoque equilibrado” en el choque entre los derechos de los homosexuales y la libertad religiosa.
La Iglesia mormona prometió apoyar algunas protecciones de vivienda y de trabajo para los gays y las lesbianas, a cambio de la protección legal de los creyentes que se oponen a la conducta de los demás.
Sin embargo, aún no está claro cuánto se puede ganar con esto, ya que la Iglesia se niega a cambiar su doctrina, y aún cree que es contra la ley de Dios tener relaciones sexuales fuera del matrimonio.