“La vida es un sendero de encrucijadas y muchas veces toma uno el sendero equivocado ¡Todos cometemos errores!”, escribió María Antonieta de las Nieves “La Chilindrina” sobre su salida de “El Chavo del Ocho” en la etapa final de su embarazo.
La declaración se incluye en el libro autobiográfico “Había una vez una niña en una vecindad”, de Editorial Planeta, que se presenta este miércoles y en él comparte lo difícil que fue abandonar su trabajo con el comediante por necesidad económica y por los rumores de la salida del aire del programa.
“Honestamente, me costó mucho trabajo decidirme a dejar a Chespirito, pero si con él ganaba 100 pesos a la semana, en canal 13 iba a ganar 2000 pesos por programa, o sea, mil pesos por semana…”, escribe y también concluye: “Todos cometemos errores”.
La comediante recalca en el texto su buena relación en aquellos años con Roberto Gómez Bolaños y con la primera esposa de éste, Graciela, pues ellos estuvieron entre los únicos 13 invitados a su boda religiosa con Gabriel Fernández y tal fue su cariño y admiración por Graciela (a quien dice, consideró como una madre), que consultó con ella su salida del programa.
“Fui a su casa, allí, Graciela, su sensacional esposa y una gran dama, en toda la extensión de la palabra, me recibió, escuchó con toda atención mi problema y me dio la razón. No era la primera vez que ella me sirviera de paño de lágrimas, como ya no tenía la guía de mi mamá, ella era la única persona íntegra en quien podía confiar. Chespirito lamentó mi decisión, pero también entendió mi situación y me dio a entender que podría regresar al programa cuando quisiera, porque mi lugar no lo iba a ocupar nadie”.
También recuerda el último capítulo que grabó con “El Chavo” y que se trataba de un pastel que La Bruja del 71 hizo para Don Ramón pero que ella devoró. La escena final, cuenta, fue como el debut de su bebé en pantalla chica así como “la escena más tierna y llena de amor que hemos hecho”.
“La última toma fue un gran close up (acercamiento) de mi barriga, la cual ya era de ocho meses de embarazo, claro, se suponía que la barrigota se me había formado por haberme comido todo el pastel, cuando el jefe de piso contó los consabidos cinco, cuatro, tres, dos y dio la señal de empezar a grabar, entonces, mi hijo Gabriel, obviamente todavía en mi vientre, hizo su debut televisivo, se empezó a mover con tanta fuerza que juré que lo había captado la cámara”.
Años después, cuenta en el mismo libro, su hijo encontró el capítulo y lo vieron juntos.
Fragmentos del libro “Había una vez una niña en una vecindad” de María Antonieta de las Nieves (Planeta 2015) publicado con autorización de Editorial Planeta Mexicana”.
“La Chilindrina” salió de “El Chavo” por necesidad económica
María Antonieta de las Nieves revela en su autobiografía que dejó “El Chavo” por necesidad económica y por los rumores de la salida del aire del progr