Gerardo Muñoz Campos culpó directamente al Consejo de Administración de Acremex de la crisis financiera que tiene en bancarrota a más de 33 mil socios en todo el estado.
El ex director general de Acremex rechazó haber autorizado el préstamo por 32.5 millones de pesos a la empresa Barol Constructora e Inmobiliaria, S.A. de C.V. sin aval y sin aprobación del Consejo (porque hay una garantía inmobiliaria), aunque sí tenía la facultad para hacerlo.
Añadió que él podía autorizar préstamos, privilegio que no tenían los consejos de Administración y de Vigilancia.
“El préstamo (de $32.5 millones) no se dio de manera incorrecta. En todos los créditos que se otorgaron hay garantía para acabar pronto”, dijo en tono muy molesto al considerar que lo han satanizado en el caso de la crisis de la caja popular.
Aunque no precisó en qué consistían las garantías. “Simplemente hay garantías, hay garantías”, aseveró.
Al ser cuestionado sobre la autorización del préstamo a la compañía vinculada con el empresario Emilio Cano Barragán dijo: “Yo no autorice nada, simplemente le di seguimiento a un asunto que estaba pendiente. Entre mis labores estaba darle seguimiento y acomodar las cosas que estaban mal. Eso me lo dejaron a mí mal”.
¿Por qué no se solicitó aval en este préstamo de 32.5 millones de pesos?, a lo que contestó de inmediato: “Para qué necesitas aval si hay garantía. Hay préstamos donde está de garantía la hipoteca”.
Reconoció que el préstamo millonario no fue aprobado por el Consejo de Vigilancia porque él tenía la facultad de hacerlo.
“Muchos de los ajustes que tuve que hacer para rescatar los créditos no los autorizaron los Consejos porque eran facultades mías, pero siembre dentro de la legalidad.
“¿Saben cuántas veces el Consejo Administrativo o de Vigilancia aprobaron los juicios o préstamos? ¿Cuándo contrataron o despidieron a un empleado? ¡Nunca!, porque eran facultades mías”, informó.
“Ese asunto (préstamo de 32.5 millones) lo arreglé yo porque era mi responsabilidad y obligación”, explicó Muñoz.
Además minimizó las denuncias presentadas ante el Ministerio Público por un grupo de socios de Acremex encabezado por Enrique Alba Martínez, dirigente de la Unión Campesina Democrática (UCD).
Señaló que no tiene autoridad moral por las demandas de presunto fraude que ha recibido en sus programas de regularización de autos “chocolates”.
“No fueron decenas de socios, fueron 14 los que estuvieron en las oficinas de las autoridades judiciales. Solo fueron a hacer desmadre porque no denunciaron. Solo fueron a que les sacaran la foto. Las supuestas denuncias nunca van a progresar porque no hay elementos jurídicos para soportar el proceso judicial”, aseguró.
Añadió que ha sido traicionado por gente que decía ser amiga y señaló a su socio Luis Muñoz, de quien se deslindó diciendo que “fue el primero que me dio la puñalada por la espalada”.
Dijo estar dispuesto a dar la cara ante los socios y a aceptar su responsabilidad en caso de que se le encuentre culpable y a no temer si es detenido.
“Con todo gusto hablaría con los socios porque tienen todo el derecho de que les de una explicación, pero me sacaron de la jugada”, lamentó.
Gerardo Muñoz manifestó que no hay pruebas en su contra.
“Las demandas o irregularidades que se han publicado, (donde lo responsabilizan) las tienen que comprobar en un juzgado y nunca va haber pruebas de eso, porque todo lo hice correctamente y de eso sí hay pruebas”.
“Me han jodido mucho. Cierren el pico y dejen que las autoridades, como la Comisión Nacional Bancaria, que tiene la facultad, el derecho y la obligación de sentenciar en esto lo hagan. Si hay juicios, si hay denuncias, que dejen que las autoridades sentencien y ejecuten”, finalizó.
‘Otorgó más créditos sin aval’
Durante 20 años Gerardo Muñoz Campos abusó del cargo que tenía para otorgar créditos entre “cuates” sin la autorización de los Consejos de Administración y de Vigilancia de Acremex, protegiéndose con apoyos sociales a instituciones como la Cruz Roja y a políticos, afirmó Juan Carlos López Espinosa, ex directivo y socio de Acremex.
“Gerardo apoyó a candidatos en campaña y que ahora están en el poder, al parecer del PAN, por eso no han procedido en su contra”, aseveró.
“Hay que ver a quién apoyó en la campaña Gerardo, de quién era el dinero, de su bolsillo no, es dinero de la caja, la bronca de las cajas son los gastos y los recursos que se dan con los préstamos”, señaló el ex socio fundador.
Dijo que es necesario que se investigue a Muñoz en relación a otra inmobiliaria de la que presuntamente es socio, y a la cual también hizo millonarios préstamos sin algún aval.
López manifestó que Acremex tuvo una crisis similar a la actual hace 20 años, por lo que tuvieron que reiniciar en ceros.
“El entonces gerente general Rafael Alcántara tenía en la quiebra a la Caja Jol-Gua-Ber (ahora Acremex) y fue cuando entró Gerardo Muñoz Campos a recomponer todo e iniciar en ceros, pero abusó de su cargo porque autorizó préstamos millonarios sin tener en cuenta a los Consejos”, denunció.
“Por reglamento hay montos, como estos 32.5 millones que autorizó a Barol Constructora, donde ‘se voló la barda’. Este préstamo tenía que ser autorizado por los Consejos, con avales, garantías, porque es el patrimonio de miles de socios. En todos lados es así, sobre todo con los bancos”, añadió López.
Subrayó que de acuerdo a las investigaciones que han realizado los mismos afectados, hay gran cantidad de préstamos que hizo Gerardo sin aval y sin tener en cuenta a los consejos, sobrevaluando las fincas y sin avalúos, bajo su propio criterio.
“Él fue quien controló Acremex durante dos décadas. Siempre fue un cacique que controló a los directivos”, finalizó.