En un intento por contener la crisis del Gobierno y de las instituciones chilenas, la presidenta chilena, Michelle Bachelet, tomó una decisión política drástica: ha solicitado la renuncia a todo su gabinete y se ha dado un plazo de 72 horas para anunciar a su nuevo equipo de ministros.
“He considerado necesario hacer una evaluación de múltiples elementos, desde evaluación de gestión a, también, cuál va a ser el equipo que me va a acompañar a este nuevo ciclo”, señaló la Mandataria socialista en una entrevista al Canal 13 de televisión.
La decisión de Bachelet, reclamada hace semanas por el mundo político, tiene como telón de fondo los escándalos de financiamiento irregular de la política investigados por la Fiscalía, que han desatado un escenario de crisis transversal tanto en el Ejecutivo, como en los partidos y las instituciones democráticas como el Congreso.
La caída de su gabinete completo, sin embargo, apunta especialmente a su ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo. Considerado su hijo político y hombre clave de esta segunda Administración que debutó en marzo de 2014.
La situación del ingeniero de 41 años resulta insostenible desde que en febrero estalló el caso Caval, la trama que involucra a la nuera y al primogénito de la presidenta chilena Michelle Bachelet, Sebastián Dávalos, y que ha causado una herida a la confianza entre la población hacia la Mandataria.
Cuando una publicación de la revista Qué Pasa destapó el 5 de febrero el millonario negocio inmobiliario de la empresa de su nuera Natalia Compagnon, la presidenta Bachelet estaba de vacaciones junto a su familia en el sur de Chile, por lo que Peñailillo, desde Santiago, tuvo en sus manos la gestión de la crisis.
La Mandataria se encontraba en su casa de verano junto a Dávalos y su esposa y, desde este círculo, se responsabiliza al ministro del Interior de no haber dimensionado la gravedad de los sucesos, que terminaron una semana después con la renuncia del primogénito a su cargo en La Moneda y su muerte política.
Con su ministro del Interior en problemas, las cifras de las últimas encuestas y los meses de escándalos políticos que incluyen a su familia, la mandataria Michelle Bachelet nuevamente intenta tomar el control de la agenda pública con el anuncio de la caída de su gabinete.
Se juega Bachelet futuro en 72 horas
La Presidenta anunciará quienes se quedan en su mandato, luego de solicitar
renuncia de todos los ministros ante crisis de credibilidad que atravie