Seguro conoces a muchas personas que tapan la webcam de su ordenador con alguna calcomanía o cinta, ¿por qué lo hacen?
Todo está relacionado con la seguridad informática y la privacidad.
En el mundo hacking la posibilidad de acceder remotamente a la webcam de un portátil aprovechando alguna falla de seguridad o vulnerabilidad en el sistema del mismo es poible.
La cámara de video del ordenador siempre es mejor tenerla tapada. Fiarse de que su LED no esté encendido es una mala idea, ya que la mayoría de las aplicaciones espías desactivan este indicador.La manera más sencilla de remediar parte del problema es cubrirla. Desde Eroski Consumer repasan por qué es necesario tapar la cámara del equipo informático y tomar medidas también con su micrófono, informa EROSKI y 20minutos.
Los expertos que acuden a los congresos de seguridad informática saben de la facilidad con que ordenadores, tabletas y teléfonos móviles pueden ser vulnerados mediante todo tipo de técnicas.
Una de las opciones al introducir software malicioso en un dispositivo electrónico es la de secuestrar el micrófono y la cámara del usuario para tomar fotografías y videos y escuchar conversaciones.
Esto es algo que afecta a cualquier ordenador con independencia de su sistema operativo. También en Mac puede suceder. Además, son actividades mucho más comunes de lo que creemos. Y son llevadas a cabo por delincuentes.
En la actualidad, a los servicios de inteligencia les resulta más sencillo vulnerar el ordenador de un objetivo que entrar en un lugar e instalar micrófonos.
En muchas ocasiones, este tipo de delincuentes extorsionan a sus víctimas para que les transfieran dinero de forma periódica como condición para no mostrar el material capturado a sus familiares y amigos cercanos. Cuando la víctima no paga, crean una cuenta en redes sociales similar a la del usuario e invitan a sus amigos y familiares. Después, liberan en ella el material sensible de la persona para desprestigiarla delante de sus círculos.
El micrófono integrado en estos dispositivos, tanto en ordenadores como en teléfonos móviles, puede ser utilizado para grabar a distancia una conversación. Una de las soluciones es poner en silencio el volumen del micrófono. Sin embargo, esto no siempre funciona, aunque la propia NSA lo recomienda a sus agentes, dentro de algunos documentos de privacidad y seguridad desclasificados, para evitar ser ellos mismos espiados. Una opción más segura, como recomiendan en Wired, es insertar una clavija de un cable viejo o roto de un micrófono en la ranura de audio para bloquear su uso.
La EFF, fundación norteamericana por la defensa de los derechos civiles en el entorno digital, comercializa unas calcomanías para las cámaras de los ordenadores. El precio es de cinco dólares y parte del costo va destinado a financiar las actividades de la fundación.