El aumento al salario mínimo en EU, una de las medidas centrales del discurso demócrata contra la desigualdad, ha encontrado en Los Ángeles el laboratorio más grande posible. Cuando aún es un debate incipiente en la mayor parte del País, el Alcalde de la ciudad firmó el sábado la ley que eleva el salario mínimo casi un 70%, de 9 dólares a 15 dólares la hora. La medida beneficia a unas 600 mil personas, por lo que Eric Garcetti lo llama “el programa contra la pobreza más grande de la historia de la ciudad”. Una de cada cuatro personas en Los Ángeles es pobre.
Poco antes, en la otra punta del País, la candidata mejor colocada del Partido Demócrata para 2016, Hillary Clinton, relanzaba su carrera presidencial en Nueva York con un discurso en el que asumía el aumento al salario mínimo dentro de su batería de propuestas contra la desigualdad, algo que también hizo Barack Obama pero que no pasó de la retórica a nivel federal. Los tres salarios mínimos más altos de EU, de 15 dólares la hora, están aprobados en San Francisco, Seattle y ahora Los Ángeles. El experimento práctico de Los Ángeles está llamado a condicionar el debate en los próximos años en todo el País.
“Vamos a hacer de Los Ángeles un modelo para todo el País”, dijo el alcalde Eric Garcetti. El mayor poder adquisitivo de cientos de miles de personas provocará un “círculo virtuoso”, dijo, en el que “ninguna familia tendrá que elegir entre pagar la renta y poner una cena en la mesa”.
Dan en Los Ángeles 70% más a sueldos
El Alcalde de la ciudad firma ley que eleva el salario mínimo 70%, de 9 a 15 dólares la hora, y se suma a San Francisco y Seattle como las ciudades co