El ex diputado federal Fernando Belaunzarán oficializó este lunes que contenderá por la dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD): “no me bajo, no declino, al contrario, voy con más fuerza para convencer conciencias”, aunque, consideró, pareciera que ya hay una “cargada” y un candidato oficial. 
Es el caso del diputado Agustín Basave, quien se afilió al PRD el miércoles pasado con el fin de buscar la presidencia de ese partido en evento que, expuso Belaunzarán, “pareció la unción de un candidato oficial o cargada”. 
Por eso pidió definir la nueva dirigencia perredista por métodos democráticos, mediante convencimiento, ideas y debate, no de nuevo por las presiones de las corrientes. 
El ex legislador ofreció este lunes una conferencia de prensa en la sede nacional de su partido, en la que leyó una carta pública a los militantes del PRD con el llamado a la “Insurrección de conciencias” con la que busca el liderazgo perredista, mismo que se definirá en Consejo Nacional, a realizarse en el marco del Congreso Nacional perredista del 17 al 20 de septiembre. 
En el texto aseguró que “hasta el momento la discusión se ha dado en un cónclave de corrientes, donde se ha decidido todo en el partido con los resultados que conocemos” y eso debe cambiar. 
“Las formas y métodos que nos llevaron al atolladero no serán las que nos saquen de ahí. Si queremos resultados diferentes tenemos que pensar y actuar de manera diferente. 
“El PRD debe resolver su paradoja. Nació para transformar al régimen y, sin embargo, muchos mexicanos nos ven como parte del status quo. Sólo vamos a poder recuperar la credibilidad perdida con nuestros hechos, es decir, predicando con el ejemplo. Si somos diferentes y no queremos parecernos al régimen ni a su partido, entonces dejémosles a ellos la unción desde las alturas del candidato oficial y la cargada; nosotros hagamos un proceso democrático ejemplar”, demandó. 
Admitió que ese proceso no puede ser en urnas y con voto universal porque por experiencia eso ha llevado al PRD a reproducir el clientelismo , por lo que pidió que la legitimidad democrática deba provenir del diálogo público. 
Entre sus propuestas para el liderazgo ofreció hacer del PRD el partido “más transparente”, en la medida que se encuere y promueva la difusión de su quehacer y discusiones públicamente, incluso a través de las redes sociales. 
Impulsará, dijo, que todos los legisladores, gobernantes, candidatos y dirigentes del PRD estén obligados a rendir sus tres declaraciones (#3de3), patrimonial, de intereses y de impuestos. 
“Debemos demostrar con hechos que el servicio público es para mejorarla calidad de vida de los mexicanos y construir una sociedad lo suficientemente abierta, diversa y plural como para que quepamos todos, y de ninguna manera para enriquecerse ilícitamente”. 

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