Tras luchar por su vida durante dos semanas, un cuarto bebé de los septillizos murió, luego de permanecer incubado desde su nacimiento.
Era una niña que nació pesando 580 gramos y murió con 530 gramos, producto de la deshidratación presentada.
La Secretaría de Salud de Guanajuato, informó que presentaba “miocardiopatía dilatada, persistencia del ducto arterioso con repercusión hemodinámica severa y hemorragia de ganglios basales”, y finalmente falleció el pasado martes 22 de septiembre a las 22:30 horas.
Al momento quedan tres de los siete bebés nacidos el pasado miércoles 9 de septiembre en el Materno.
Todos presentaron prematurez extrema, los sobrevivientes son atendidos en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales en donde son atendidos por especialistas del Hospital Materno de Celaya.
El primer bebé falleció el viernes 11 de septiembre a las 13:00 horas, fue una niña que pesó 450 gramos. El segundo murió el sábado 12 de septiembre a las 8:03 horas, fue un varón, quien al nacer presentó un peso inicial de 580 gramos.
Un tercer bebé murió el pasado sábado a las 6:40 de la mañana, tras 10 días de haber nacido.
A la fecha sobreviven tres. Es una bebé y dos masculinos, quienes aún se mantienen delicados de salud.
Desde que nacieron, los médicos informaron que los siete estaban delicados de salud, sobre todo por su peso y porque apenas y llegaron a la semana 26 de gestación (poco más de seis meses).
La madre de los pequeños es María del Rosario Hernández Tovar de 30 años, originaria de Coroneo y su papá es Ramiro Cancino
La madre ingresó al Hospital Materno Infantil hace casi dos meses, debido a que era un embarazo de alto riesgo. Se esperaba que con la hospitalización y estar al pendiente de la salud de la mamá, lograr llegar a la semana 28 ó 29 de embarazo pero sólo llegó a la 26. Se le practicó una cesárea.
Francisco Ignacio Ortiz Aldana, secretario de salud, informó que se trabaja en lo humanamente posible para atender a los bebés sobrevivientes, pues al nacer su peso fluctuaba entre 550 y 650 gramos de peso cada uno.
Este es el primer nacimiento de septillizos registrado en la historia del estado de Guanajuato.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *