Aunque Uber tiene un servicio más personalizado y cómodo para los pasajeros, de acuerdo a la tarifa que determine el operador el taxi tradicional puede resultar más barato.
En tres taxis am hizo un recorrido de Centro Max a Plaza Mayor con la misma ruta, alrededor de 13.5 kilómetros, en un tiempo de 25 minutos.

$90 el taxi tradicional

El taxi se abordó después de 10 minutos de espera en el López Mateos y el operador informó que el costo sería de 90 pesos.
El vehículo no era de último modelo, sin embargo se encontraba en buen estado; el taxista vestía camisa y pantalón de mezclilla, y su tarjetón se encontraba a la vista.
Al preguntarle su opinión sobre Uber respondió que “es malo porque al final de cuentas no deja de ser un taxi pirata, pero siento que es bueno porque ayudará a que este monopolio se regularice”, dijo José.
Consideró que para que exista una competencia sana debería implementarse el taxímetro y algunas reglas que permitan que todos ganen; no usaba el cinturón de seguridad y no dio rutas alternas para llegar al sitio indicado.
José ofreció pagar en efectivo o con tarjeta, ya que cuenta con la aplicación Easy Taxi.

$120 con Taxitel

El segundo viaje se solicitó a Taxitel mediante una llamada del teléfono celular, la operadora preguntó ubicación, vestimenta, destino y teléfono del usuario.
La llamada duró poco más de dos minutos pues tardaron en responder. “De cinco a 10 minutos llega su unidad”, aseguró la operadora.
El taxi llegó después de cinco minutos, el operador saludó amablemente y tras preguntársele la tarifa de Plaza Mayor a Centro Max aseguró que era de 120 pesos.
Al intentar regatear respondió que el costo era definitivo, “y si fuera en horario de la noche aumentaría el precio 20 pesos más”.
El taxista, aseguró que con la llegada de Uber no ha recibido indicación de disminuir tarifas y que ese era el precio que se cobraba por trayecto.

$107 con Uber

Para contactar a Uber se usó la aplicación previamente descargada en el teléfono móvil, se compartió la ubicación y se indicó que había tres unidades disponibles.
“En tres minutos pasan por usted”, se leía en un mensaje de confirmación.
El perfil de César, el operador, se mostraba en la parte inferior de la pantalla.
Al subir al auto negro de modelo reciente se sintió el aire acondicionado, César saludó cordialmente y ofreció una botella de agua; vestía camisa y pantalón oscuro.
“¿Podemos comenzar con el recorrido? ¿tiene alguna ruta de trayecto o podemos utilizar mi ruta? ¿le parece bien esta música o qué música desea escuchar?”, fueron algunas preguntas que hizo antes de comenzar el trayecto.
El costo del viaje fue de 107 pesos, pagados mediante la transferencia directa de la aplicación.

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