Cámara de súper espía

Cuando me enteré de que pondría a prueba el Xperia Z5, lo primero que pensé fue en la campaña publicitaria en la que este teléfono se anunciaba como el equipo especialmente fabricado para el 007, y no pude dejar de imaginarme ordenando martinis y persiguiendo criminales.
¿Qué tiene el teléfono de James Bond? Una pantalla de 5.2 pulgadas Full HD, un procesador Qualcomm Snapdragon 810 de 8 núcleos y 32GBs de memoria, que puede expandirse hasta  200 con una tarjeta microSD.
Hasta este punto el smartphone resulta tan bueno como otros teléfonos de su gama, pero, bajo las características regulares del teléfono de Sony, se esconde la cámara de un verdadero superespía, con una resolución de 23 megapixeles, grabación de videos en formato 4K y enfoque automático que reduce el tiempo de captura de fotos a sólo 0.03 segundos.
Debo confesar que, de no haber probado el Xperia Z5, no hubiera caído en cuenta de cuán lenta es la cámara de mi teléfono normal, con el cual me había acostumbrado a la espera de algunos segundos una vez apretado el botón de captura.
La velocidad del Z5 es verdaderamente notoria cuando se intenta tomar imágenes de objetos o personas en movimiento, ya sea en eventos deportivos o en la vida cotidiana y, por si fuera poco, el equipo tiene un botón en el costado que permite accionar el obturador. Bajo el sol o la lluvia uno no deberá sufrir para que la pantalla táctil del teléfono reaccione a tiempo.
El Xperia Z5 cuenta además con otro toque muy al estilo del 007: un sensor de huella digital en el costado, al cual me he vuelto un verdadero adicto, pues ahorra bastante tiempo para desbloquear el teléfono con sólo colocar el dedo sobre él.