Hacer un ducto submarino enfrentaría a la CFE y a su contratista a la inseguridad de Tamaulipas y Veracruz, de acuerdo con expertos.
A ello se sumaría también la posibilidad en un retraso en el proyecto por la obtención de los derechos de vía.
David Enríquez, socio líder de Energía del despacho Goodrich Riquelme y Asociados, explicó que un gasoducto marítimo, a diferencia de uno terrestre, evadirá temas de inseguridad y retrasos por derechos de vía.
“Desde el punto de vista de ingeniería es más caro, pero al tener un impacto tan fuerte el tema de extensión de derechos de vía en tierra que hace que te demores, es cuando puedes empezar a comparar si tiene lógica hacerlo en mar”, dijo.
Por su parte, Jorge Rafael Coffau, presidente de la Coparmex en Veracruz, reconoció que existen muchas zonas rojas en el límite de Tamaulipas y Veracruz, donde se comenten robos, secuestros e incidentes que podrían amenazar a un gasoducto de las características de la obra Texas-Tuxpan.
Las evaluaciones de estos especialistas coinciden con el aumento de incidentes de robo que han detectado tanto la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar) como la Cámara Nacional de la Industrial del Hierro y del Acero (Canacero).
En el caso de los acereros, Veracruz y Tamaulipas representan 25% de los 136 robos que han registrado entre enero a agosto de este año, mientras que la Canacar calculó un aumento de 15% de robo en estas entidades respecto al mismo periodo de 2014.
CFE planeó construir este gasoducto frente a las costas de Tamaulipas y Veracruz, desde un punto cercano a Brownsville, Texas, hasta Tuxpan, Veracruz.
Según la empresa, el desarrollador determinará el punto exacto de interconexión en EU.
Este ducto tendrá una extensión en EU que transportará el energético desde Nueces, Texas, hasta Brownsville.
La recepción de propuestas de privados para la construcción del gasoducto está programada para enero de 2016 y el fallo de la licitación se dará en marzo de ese año, según el calendario de la licitación.
El contrato de suministro de gas natural será de 25 años, empezando el 30 de junio de 2018.
Rosanetty Barrios, titular de la unidad de Políticas de Transformación Industrial de la Secretaría de Energía (Sener), señaló que este ducto es uno de los proyectos estratégicos de la Administración porque transportará gas que demandará la CFE en sus centrales cercanas al Golfo de México.
Esta demanda de gas es transportada actualmente por Pemex en la costa del Golfo, la cual se liberará cuando el submarino entre en operación, según el plan quinquenal de gasoductos 2015-2029 que presentó el Centro Nacional de Control de Gas Natural (Cenagas).
Hasta el momento 18 empresas se han declarado interesadas en participar entre las que se encuentran Carso Electric, de Grupo Carso; Abengoa; Enbridge Offshore; las filiales de Transcanada (Transportadora de Gas Natural de la Huasteca) y IEnova (Gasoducto de Aguaprieta); Arendal; Fermaca; ICA Flúor; Tubacero; Techint entre otras.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *