Habitantes de la zona norte de la ciudad exigen a las autoridades municipales que suspendan el proyecto de la tercera y cuarta etapas del Sistema Integrado de Transporte (SIT).
Argumentan que no se ha respetado el entorno ecológico y que las autoridades nunca los tomó en cuenta para el proyecto, por lo que se oponen a la tala de árboles en el bulevar Hidalgo, señalando que son el hogar de gran cantidad de aves conocidas como cotorras argentinas.
Ayer por la mañana se reunieron con funcionarios municipales en el área donde se pretende construir la Microestación ecológica para entregar lo que llamaron un “Pliego de reivindicaciones dirigido a la Comisión de Medio Ambiente”.
“Ahora resulta que dicen que las cotorras argentinas que anidan en los árboles del bulevar Hidalgo son aves invasoras y que deben ser controladas. Eso no puede ser, son argumentos absurdos”, dijo María Huerta.
Ahí estuvieron el director de Gestión Ambiental, Ricardo de la Parra Bernard; el director de Obra Pública, Carlos Alberto Cortés Galván; los regidores Beatriz Yamamoto Cázares, Sergio Contreras Guerrero y Ana María Carpio Mendoza, para escuchar los reclamos de los inconformes.
Leyeron el pliego de peticiones, donde exigieron “la suspensión inmediata de las obras del proyecto para la cuarta etapa del corredor troncal de transporte de la estación San Jerónimo a la de Echeveste” que ya está en curso.
El titular de Obra Pública reconoció que el proyecto tendrá un impacto ambiental, pero dijo que se ha buscado que sea mínimo, y que será más el beneficio con un mejor transporte.
Con cartulinas los vecinos mostraron su inconformidad, pero no con el proyecto en sí, sino por la tala de árboles, porque señalan que arruinarán el proyecto de un parque lineal y que se disminuirán las ya precarias áreas verdes en la zona.
“Exigimos respeto al derecho humano al medio ambiente a través de una Comisión de expertos independientes y la liberación de toda la información relativa al proyecto, porque hasta la fecha nunca se nos tomó en cuenta”, dijo Gustavo Lozano.
También exigen garantía de que se respetará toda la flora y fauna, así como una línea estratégica sobre desarrollo sustentable para recuperar espacios naturales y áreas verdes.
Aseguran reducir tala
El director de Gestión Ambiental, Ricardo de la Parra Bernard, insistió en que se respetará el medio ambiente y el mayor número de árboles para la tercera y cuarta etapas del Sistema Integrado de Transporte (SIT), sobre todo en el bulevar Hidalgo.
“En el tramo que corresponde al corredor troncal de transporte San Jerónimo-Echeveste se tienen contabilizados mil 74 árboles de distintas especies”, informó.
“En el proyecto inicial del SIT se contemplaba la tala de 369 árboles que representaba 34.35% del padrón”, dijo.
Añadió que con las modificaciones al proyecto, los datos de afectaciones arbóreas quedan como 193 árboles para la tala, que representan 17.97%, de los cuales 40 son para trasplante (3.72%) y 53 para poda (4.93%).
“Con lo anterior se obtiene una permanencia del 78.31% de árboles en el corredor, es decir, 841 en total”, aseguró.
El funcionario dijo que la modificación al cálculo de árboles se debe a que originalmente se tenía proyectado construir la microestación Aurora y el paradero Talabarteros, ambos sobre el bulevar Hidalgo, en el tramo del bulevar Ibarrilla al Talabarteros.
“Ahora que se cambió el proyecto y el diseño se integra la vegetación existente y disminuye el área de afectación.
De la Parra precisó que en el tramo entre los bulevares Ibarrilla y Talabarteros se talarían 217 árboles.
Con la modificación disminuyó la afectación a sólo 44 árboles, de los cuales 36 serán talados y ocho trasplantados.
Pero la explicación que dio el funcionario no convenció.
Al final la regidora Beatriz Yamamoto, presidenta de la Comisión de Medio Ambiente, pidió que firmaran un acuerdo para analizar las inconformidades de los colonos, pero no se comprometió a dar fecha de respuesta.
Lo mismo hizo el regidor del Verde, Sergio Contreras, quien les dijo que analizarán todas sus peticiones.
Alertan sobre plaga de cotorras
Autoridades de Gestión Ambiental dieron a conocer que la creciente población del ave conocida como cotorra monje o argentina se está convirtiendo en una plaga en León.
Además dijeron que este animal es el principal propagador de la llamada flor de mezquite o muérdago, que ha causado la muerte de cientos de árboles de diversas especies.
Ricardo de la Parra Bernard, titular de la dependencia, dijo que lo que comenzó siendo una inofensiva mascota perteneciente a la familia de los loros se ha distribuido de forma natural en León.
El biólogo añadió que su población se ha incrementado notablemente porque su reproducción es muy alta.
Dijo que esta ave se alimenta principalmente de muérdago, pero el problema es que al comer las semillas, ésta va y las tira en forma de excremento en diversos lugares, al grado que el muérdago es una plaga que también va en crecimiento.
Ángel Ordaz Santos, veterinario del Zoológico de León, manifestó que en muchos países de América, incluso de Europa, se ha convertido en una plaga a tal grado de que se han tenido que utilizar medidas de control, sacrificándolas.
“En León ya son notorias las parvadas de estas aves. Ya se les puede ver en diversos parques y zonas arboladas. Se multiplican rápidamente y no sabemos qué pasará en pocos años, pero sí llegan a convertirse en una gran plaga”, aseveró.
Precisó que la cotorra argentina es parecida a lo que en León conocemos como “periquitos” y hacen sus nidos en árboles que tienen una altura de más de 10 metros, por lo que el Parque Hidalgo se ha convertido en su principal refugio.
“La cotorra argentina es un ave exótica catalogada como invasora. Dentro de las aves introducidas se trata probablemente de la especie que más ha crecido”, añadió el funcionario.