Pese que ayer 25 de diciembre fue un día de asueto, diversos comercios sí abrieron y trabajaron.
Con ánimo en el rostro atendieron a todos mientras esperaron tener muy buenas ventas.
Micaela García, dueña de la tortillería El puente colorado, indicó que estuvo “trabajando de 8 de la mañana a 6 de la tarde”.
Con el fin de brindar un producto caliente y escaso en días de fiesta, él celebra con su familia temprano.
El 25, Micaela llega a vender el doble de lo usual, lo cual repercute de forma positiva en su economía familiar.
Nunca falla
Por su parte, don Kina ofrece sus duros y guacamayas en esta fecha porque “me gusta mi trabajo y complacer a la gente (…) nunca he fallado y más en estas fechas”.
Muchos de sus clientes son personas que llegan a “curar” la resaca producida por los excesos navideños.
La mayoría de sus clientes llegan a la una de la tarde, pero él está listo desde las 9 de la mañana y se retira hasta las 5 de la tarde, ya que en este día le va muy bien.
Y la Central Camionera ofrece la mitad de los recorridos que realiza usualmente, con el fin de permitir la movilidad de personas entre ciudades y comunidades.
“Comenzamos a las 7 de la mañana y acabamos pasadas las 11 de la noche” comentó Mauricio Garcés, despachador de servicios.
Sin descanso comercios
Pese que ayer 25 de diciembre fue un día de asueto, diversos comercios sí abrieron y trabajaron.