Germán Díaz, participante de la Expo Artesanal de San Francisco del Rincón, se dedica desde hace 25 años a grabar el amor de las personas en metal.
Originario de Querétaro, se considera un autodidacta del grabado en metal, ya que comenzó su negocio sin enseñanza de nadie.
En su local ofrece cadenas, anillos, esclavas y dijes y encendedores, siendo aquellos con forma de corazón, su producto más vendido.
En promedio, realiza 25 grabados por día de trabajo. Con una máquina eléctrica, la cual posee una punta de tungsteno y que vibra a gran velocidad, “escribe” en el metal.
Cada trabajo dura un promedio 10 minutos, ya que depende del largo de la palabra y del número de piezas que le soliciten.
Los precios oscilan desde los 15 hasta los 400 pesos, ya que no sólo ofrece alhajas, también vende juguetes, carteras y playeras, aretes y expansiones de piercing, así como figuras decorativas hechas en metal.
Por su parte, comenta que no es la primera vez que visita San Francisco del Rincón, y para él no hay descanso, pues pasa la mayor parte del año en Expos de artesanías en compañía de su madre y familia.
“Escribe” en metal
Germán Díaz, participante de la Expo Artesanal de San Francisco del Rincón, se dedica desde hace 25 años a grabar el amor de las personas en metal.