Comerciantes del mercado de Purísima “Manuel G. Aranda”, comenzaron el año con buenas ventas, al ser de los poco lugares que ofrecen sus servicios durante el primer día del año.
Desde las 7 de la mañana se encontraban distintos negocios abiertos, ofreciendo desayunos y productos varios a quienes madrugaron y a los que aún no terminaban su festejo.
Simón Estoliano, ofrece menudo en el interior del mercado, y continúa la tradición de su madre, quien desde hace 30 años ofrece su producto aún en Navidad o Año Nuevo.
Comensales acuden con él, con la seguridad de encontrar un delicioso caldo y así “curar” los malestares de la fiesta.
Roberto Sainz “el de los chocomiles”, ofrece sus tradicionales bebidas en compañía de su padre; quien desde 1977 engolosina a los purimenses.
“Nosotros, los que vendemos comida, estamos conscientes de que nuestra labor es brindar servicio cuando los demás descansan”, declaró mientras atendía varios pedidos al mismo tiempo.
Considera que su mejor venta la realiza de noche, al permanecer abierto hasta las 11, lo cual permite que personas de San Francisco, Manuel Doblado e incluso León los visiten.
Por su parte, Víctor Hugo, de la carnicería La Misericordia, comentó que siente un gran compromiso hacia su clientela, por lo que busca darle un servicio constante.
Siempre abiertos en el mercado de Purísima
A pesar de ser día festivo atendieron a sus clientes.