El Servicio de Administración Tributaria (SAT) endureció su postura frente a los contribuyentes en 2015, a quienes cobró 3 mil 953 millones de pesos más en multas que en 2014.
Según datos del informe de finanzas públicas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), el año pasado, el fisco impuso a las empresas y personas físicas del País 7 mil 824 millones de pesos por concepto de multas fiscales.
Dicha cifra es la más elevada para las multas que establece a la autoridad a los contribuyentes desde 2011.
En contraste, en 2014 el total de las multas fiscales que aplicó el SAT sumaron 3 mil 871 millones de pesos, de acuerdo con los datos de la SHCP.
La mayoría de multas que estableció el fisco el 2015 fueron por correcciones fiscales, es decir, pagos que la autoridad consideró que debían realizarse y que el contribuyente había omitido en sus declaraciones.
Tan sólo por ese concepto los contribuyentes terminaron pagando 3 mil 968 millones de pesos en 2015, cuando un año atrás únicamente desembolsaron 987 millones.
Nuevamente, únicamente en 2011 el fisco había multado tanto a los contribuyentes por concepto de correcciones fiscales.
El SAT también cobró a los pagadores de impuestos mil 17 millones de pesos por incumplimientos o extemporaneidades a requerimientos del Registro Federal de Contribuyentes (RFC) y control de otras obligaciones.
Por infracciones a disposiciones en el comercio exterior, el fisco impuso multas que sumaron 722 millones de pesos.
Quienes se libraron en buena medida del rigor del fisco fueron las entidades federativas, pues las multas a las que se hicieron acreedores sumaron apenas 526 millones de pesos.
De acuerdo con los datos de la SHCP, el fisco también obtuvo un total de 140 mil 488 millones de pesos a raíz de las auditorías que realizó a los contribuyentes a lo largo del año.
De ese total, 49 mil 488 millones de pesos ingresaron en efectivo a las arcas del SAT, el resto fueron ingresos derivados de disminuciones de saldos a favor, reducciones de pérdidas fiscales, amortizaciones, estímulos, compensaciones, adjudicaciones y acreditamientos.
Para fiscalizar a los contribuyentes, el año pasado la autoridad destinó 2 mil 959 millones de pesos, también uno de los montos más elevados en los últimos años para ese concepto.
Dados los recursos que el Servicio de Administración Tributaria destina a la realización de auditorías y lo que luego recupera de los contribuyentes, la propia autoridad asegura tener una buena rentabilidad de ese gasto.