Las banquetas de algunas calles de la ciudad se han convertido en un peligro para los peatones, por los obstáculos que hay en ellas.
Los espacios diseñados para el paso de las personas son obstruidos con todo tipo de objetos.
Coladeras abiertas, mesas, llantas, bicicletas y hasta autos estacionados provocan que los transeúntes tengan que caminar sobre el arroyo vial.
“No sé si alguna autoridad se encargue de quitarlos, yo creo que no. La verdad, aunque no parezca, es peligroso para todos que la gente camine debajo de las banquetas solo porque no pueden pasar porque hay puestos o carros en ellas”, comentó Fernanda García, peatón.
Esta problemática se observa sobre todo en las avenidas y bulevares, sitios donde comúnmente se realizan actividades de cualquier tipo de comercio.
En las calles afectadas hay todo tipo de comercio: ambulante, semi-fijo y fijo.
La mayoría de las actividades comerciales se realiza en las mañanas, aunque en algunos casos, como los talleres mecánicos o vulcanizadoras, la obstrucción de las banquetas ocuerre durante la mayor parte del día.
Un ejemplo de esta situación se observa en la avenida Miguel Alemán, donde los comerciantes ambulantes son los dueños de las calles.
“Nos tenemos que bajar para poder pasar, en esta avenida está muy peligroso el cruce porque los carros vienen de todos lados”, dijo Oscar Valle, peatón.
A decir de algunos comerciantes la “calle es libre” y la actividad económica que realizan no afecta a nadie, ni viola ninguna ley.
am consultó a diferentes dependencias municipales como Desarrollo Urbano, Tránsito, Obra Pública y Economía, que se ‘aventaron la bolita’ entre ellas.
La Dirección de Desarrollo Urbano, mediante su enlace de comunicación, señaló que todos los temas relacionados con el ordenamiento en las calles le competen a la Dirección de Obra Pública y a la de Tránsito Municipal.
Mientras que el enlace de Obra Pública señaló que la dependencia encargada de regular dicha actividad es Tránsito Municipal.
Al respecto, la Dirección de Tránsito informó que sus elementos pueden intervenir en caso de que automóviles sean los que obstruyen las banquetas.
Lo anterior según el artículo 16 del Reglamento de Tránsito Municipal, que en el inciso nueve establece que se prohíbe estacionar “en aceras, camellones, andadores, retornos, isletas u otras vías y espacios reservados a peatones”.
Los autos estacionados en los espacios mencionados serán acreedores a una multa, una infracción que actualmente tiene un costo de 73 pesos.
En tanto, la Dirección de Comercio y Consumo, perteneciente a la Dirección de Economía, refirió que la Dirección de Fiscalización es la encargada del ordenamiento de los comercios que ocupen parte de los espacios públicos para peatones para realizar su actividad comercial.
Por diferentes medios se buscó la postura de la Dirección de Fiscalización. Sin embargo no hubo respuesta.
Otras zonas críticas donde los peatones y los propios clientes padecen con este problema son las calles de Zona Piel y algunas otras del centro de la ciudad, aunque establecimientos de comida, talleres mecánicos y negocios como vulcanizadoras abusan y ocupan las banquetas a lo largo de toda la zona urbana.