Se quejan derechohabientes de la nueva modalidad del servicio de urgencias en IMSS llamador “triage”.
La molestia radica en que ahora no se permite el acceso a todas las personas al área de urgencias y deben esperar afuera a la intemperie a su familiar enfermo.
A la redacción de Am Express acudieron derechohabientes a exponer su inquietud y pedir a quien corresponda que se haga lo conducente para evitar un calvario más para enfermos y familiares.
José Jiménez remarcó que desconocen con exactitud cómo funciona ahora el sistema de urgencias quien expuso “en nada se ve una mejora sustancial, a excepción de los bonos que deben recibir los directivos al provocarle ahorro sustancial al IMSS”, externó en su opinión personal.
Indicó que él ha detectado ciertas anomalías, como la deficiente atención de enfermos y la poca cantidad de medicamentos que les suministran para su tratamiento.
Aseguró que a su pequeño hijo le suministraron insulina inyectada, pero personal médico de guardia no tenían ni jeringas en el lugar.
Asimismo comentó que casi despiden a una doctora, pues ella decidió comprar Paracetamol de forma personal para estabilizar a menores de edad.
Otra derechohabiente, María Elena Cervantes, dijo que es muy importante se atienda esta demanda, ya que es injusto permanecer por horas sin recibir atención.
Relató que hay una persona de enfermería calificando las urgencias por colores, y no los médicos.
Agregó que cuando se han quejado, la respuesta de médicos es que solo hay 3 doctores: el que atiende pacientes que llegan en ambulancias, el que hospitaliza y el primer filtro que revisa a los pacientes con alguna urgencia.
Sin embargo, si alguno de estos falla, el otro debe cubrir dicho espacio provocando con ello que se acumule el trabajo, se haga lenta la atención y sea por tanto el enfermero quien clasifique las urgencias en los colores del Triage.
Escoger y separar
De origen francés
El sistema Triage, implementado hace un par de meses, clasifica la urgencia por colores.
El rojo es de máxima prioridad y se trata de cuando el paciente tiene la posibilidad de sobrevivir y la atención médica debe ser inmediata.
El amarillo es para pacientes que tienen una situación de urgencia con riesgo vital.
El color verde se refiere a aquellos levemente lesionados y que pueden caminar.
El color azul se trata de pacientes que acuden con molestias menores y esperan ser atendidas de inmediato.