Uno de los momentos más soñados de la pareja formada por Dinora Helena Aréchiga Carvajal y Octavio Romero González se hizo realidad con la unión de sus vidas en matrimonio.
A varios años de un noviazgo que cada día alimenta su amor sin final, la pareja decidió unir sus vidas para siempre a través del sacramento del matrimonio en uno de los templos más representativos de la ciudad; El Hospitalito.
Dinora Helena ingresó a la parroquia del brazo de su papás, los señores Alfredo Aréchiga Pérez y Ma. Teresa Carvajal Mejía.
Frente al altar Octavio esperó a su amada, y en este importante momento el novio contó con la presencia de sus amados padres, Tomás Romero Miranda e Irma González García.
Lleno de ilusión y más enamorado que nunca, Octavio entregó las arras al amor de su vida, seguido de la promesa de un amor sin final.
Convertidos en esposos para toda la vida, los esposos se trasladaron al jardín de San Antonio de Ayala, lugar donde disfrutaron de una especial fiesta.