En un rincón, bajo sombrillas o con sólo una cobija, es como duermen adultos y niños afuera del Hospital General Regional (HGR), del Materno Infantil y de la clínica T-1 del IMSS.
Aunque hay albergues cerca de los hospitales, hay quienes prefieren dormir lo más cerca de la puerta principal por si los médicos salen a dar indicaciones relacionadas con sus familiares enfermos.
“Cuido a mi sobrina y pasé la noche en el pasillo, no nos dejaron pasar, eramos como 20 personas entre ellas una niña como de siete años que tenían dormida en el piso sin cobijas”, comentó Dolores Ordaz, vecina de la colonia Las Joyas.
Frente al Materno rentan habitaciones amuebladas y con todos los servicios por mil 300 pesos al mes.
En la clínica T-1 del IMSS a las ocho de la noche llega una ambulancia que lleva a las personas a un albergue.
“La gente prefiere quedarse bajo los toldos o en la jardinera para esperar una respuesta por parte de médicos”, aseguró Juan José Cruz, comerciante.
Además señaló que indigentes también llegan a dormir afuera de la clínica para protegerse del frío o de la lluvia.
Mientras que en el HGR las personas acomodan cobijas y cartones sobre bancas para descansar un rato en la noche.
El albergue de Cáritas, ubicado en la calle paralela al HGR, cobra 20 pesos diarios; allí las personas pueden ir a dormir, asearse y comer tres veces al día por el mismo costo.
Guadalupe Martínez, encargado del albergue, aseguró que en los 10 años que tienen brindando el apoyo nunca han llegado a tener las 76 camas con las que cuentan ocupadas.
Olivia Rodríguez, de Purísima, lleva dos noches durmiendo afuera del HGR con la esperanza de que su tío se recupere.
Sufren familiares de pacientes afuera de hospitales públicos
Duermen lo más cerca de la puerta principal por si los médicos salen a dar indicaciones relacionadas con sus familiares enfermos.