El dolor de cabeza para los automovilistas que transitan por la Autopista México-Querétaro, que una vez más está en obras, parece no tener fin.
Debido a trabajos de mantenimiento en tres distintos tramos, la vía, por la que transitan diariamente más de 100 mil vehículos, enfrenta de nueva cuenta un tráfico intenso.
Se trata de los tramos Querétaro-San Juan del Río, Tepeji-Tepoztlán y Coyotepec, en los que, de acuerdo con traileros y usuarios, la fila de camiones y autos alcanza en horas pico, hasta los 25 kilómetros.
En el primero de los tramos se inició la reparación de 37 kilómetros de concreto hidráulico, trabajos en los que se invertirán 75 millones de pesos y se prevé que concluyan hasta diciembre.
Las obras han ocasionado la molestia de los usuarios, quienes reportan que, en horas pico, tardan dos horas para cruzar un tramo de 16 kilómetros que normalmente realizan en siete minutos.
En un segundo tramo, en Tepeji, se invertirán 352 millones de pesos para colocar concreto hidráulico y los trabajos terminarán hasta mayo de 2014, según información de Caminos y Puentes Federales (Capufe).
“La México-Querétaro es nuestra mejor carretera, pues se volvió a hacer de concreto en (el tramo de) Querétaro, pero es la más destrozada.
“Es la carretera de nunca acabar”, afirmó Elías Dip Ramé, presidente de la Confederación Mexicana de Transportistas Mexicanos.
En tanto, el senador queretano Francisco Domínguez reprochó en Twitter: “Esa carretera lleva 20 años en obra y por lo visto seguirá por la eternidad… el tráfico horrible, y justo ahora en temporada vacacional… Muy mal Capufe”.
Rafael Ortiz Pacheco, dirigente de la Alianza Nacional de Organizaciones de Transportistas, precisó que existe falta de planeación y descoordinación entre Capufe y la PF para evitar los congestionamientos.
En 1998, cuando el presidente Ernesto Zedillo impulsó el uso del concreto en esa vía, presumió una inversión de 650 millones y aseguró que se reducirían los costos de mantenimiento, lo cual no ha ocurrido.
Tan sólo en los últimos tres años, la SCT reporta, para la conservación de esta vía, la asignación de 186.4 millones en 2010; de 216.6 millones, en 2011 y de 163.9 millones, el año pasado.
En tanto, Juan Cerda Ochoa, titular de la Delegación Centro Norte de Capufe, justificó que se trata de molestias que van a repercutir en un mejor servicio para los usuarios de la autopista.
‘Ahorcan’ autopista obras
Las obras de rehabilitación en la autopista México-Querétaro tendrán un costo global de 427 millones de pesos y concluirán hasta mayo del 2014.
Tres tramos de la vía federal 57, que tiene más de 60 años, están en reparación desde mayo. En dos, se realiza la sustitución del concreto hidráulico debido a los daños causados por el peso de los camiones; en el otro, se trabaja en la ampliación de carriles.
Los trabajos de restauración, que realiza la empresa Coconal entre el kilómetro 170 al 183 de la autopista, en el municipio de Pedro Escobedo, Querétaro, comprenden dos de los tres carriles de la vía y obliga a los usuarios que se dirigen a la Ciudad de México a ocupar sólo un carril e incluso invadir uno con dirección a Querétaro.
Otra obra se realiza entre los kilómetros 52 al 73, en el municipio de Tepeji del Río, en Hidalgo, la cual está a cargo de la empresa Sky Universal, de acuerdo con datos de Caminos y Puentes Federales (Capufe).
Juan Cerda Ochoa, titular de la Delegación Regional III Zona Centro Norte de Capufe, los trabajos que se realizan en Querétaro representan un problema complejo pues se combina tráfico de largo itinerario con tráfico urbano, lo que significa un alto volumen de vehículos circulando por la zona.
“Tenemos ahí un tránsito del orden de 50 mil vehículos al día; entonces, lo que es un hecho es que estamos pidiendo la comprensión del usuario, que con este alto volumen de tránsito”, pidió en entrevista.
Uno de los tramos más conflictivos es el que va de Tula a Tepozotlán, de 15 kilómetros, donde se realizan trabajos de rehabilitación de los tres carriles de la vía federal.
“Estamos atendiendo las zonas más dañadas. Tenemos por un lado la rehabilitación de la obra y, por el otro, el proyecto de echar concreto hidráulico del kilómetro 68 al 73 del cuerpo A y del 52 al 73 del cuerpo B”, explicó Raúl Rodríguez, residente de Capufe en Tepeji del Río, Hidalgo.
Al mismo tiempo, añadió, se rehabilitan las obras de drenaje y estructuras, zonas laterales, derecho de vía, señalamientos horizontales y verticales de la autopista México-Querétaro en el tramo Tepalcapa-Palmillas.
Cerda Ochoa explicó que aunque no hay problemas de espacio para maniobras de maquinaria, ni un alto volumen de vehículos, las obras en Hidalgo son más costosas y tardarán más porque habrá un cambio completo del pavimento.
Usuarios de la carretera 57 manifestaron su molestia por los trabajos ya que normalmente recorren los 16 kilómetros en 7 minutos y ahora se tardan hasta dos horas en el traslado.
Antonio Valdés, trailero con 30 años de experiencia, afirma que en ocasiones la fila de camiones y automóviles alcanza hasta 25 kilómetros.
“Me tocó hace unos días estar una hora ahí en el embudo. Me ha tocado ver accidentes, alcances sobre todo, y luego la fila llega a veces hasta Bernardo Quintana y quienes vienen encarrerados, bajando de la cuesta china, no tienen ninguna información de lo que está pasando”, comentó.
En las obras de rehabilitación trabajan 45 hombres, divididos en dos turnos de 7 horas, con dos máquinas cortadoras de concreto, una excavadora, seis taladros hidráulicos y tres ollas de concreto, de acuerdo con la empresa Coconal.
Elías Dip Ramé, presidente de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos (Conatram), consideró que el peso constante de camiones de carga, principalmente con doble remolque, destroza la carpeta asfáltica de las autopistas, por más tecnología que se emplee para su obra.
“Es una vía donde van hasta tres camiones juntos de manera frecuente o van invadiendo todos los carriles y la Policía Federal, que pagamos todos, ¿dónde está?”, criticó el transportista.
En cambio, el diputado local Jorge Lomelí, presidente de la Comisión de Obras Públicas y Comunicaciones del Congreso de Querétaro, consideró que la autopista está mal hecha desde el principio.
“Ha faltado planeación. Me parece que tienen que invertir más en la calidad de los arreglos. Se supone que es una carretera de concreto, es para que te dure 50 años y me parece que no tiene ni siquiera 25 ó 26 años, entonces estuvo mal hecha de origen”, lamentó.
? ? La carretera se ha deteriorado aún más a partir del 2008, cuando autorizaron a los fulles (tractocamiones de doble remolque) circular por las vías federales .? ?
Rafael Ortiz
Dirigente nacional de la AMOTAC