Adultas mayores piden ayuda a los fieles en la puerta del templo del Señor de La Piedad
Dos mujeres de 70 y 79 años de edad, acuden todos los días a las puertas del templo del Señor de La Piedad, buscando la ayuda de los fieles que visitan este recinto.
Angelina Álvarez Pérez de 70 años de edad es originaria de San Juan de los Lagos, Jalisco; mientras que Rosario Hernández Reyes de 79 años de edad es originaria de Yurécuaro, Michoacán.
Las dos septuagenarias se sientan en la puerta principal del templo, añorando tener una oportunidad de trabajo como cuando eran jóvenes.
La señora Angelina actualmente vive en Numarán; pero acude a esta ciudad a buscar el pan de cada día, “algunas personas me obsequian una moneda y otras me regalan alimentos y de vez en cuando ropa y zapatos”, mencionó.
Sobreviven con la vejez
“La vida es muy dura, y más cuando ya estás grande y nadie te quiere dar trabajo, por eso a veces preferiría ya no estar aquí sufriendo la pobreza”, contó Angelina.
Por otra parte la septuagenaria trata de hacerle frente a la vida, bordando servilletas de tela, aunque en realidad es más el trabajo que invierte que lo que una persona le puede pagarle, ya que una servilleta le cuesta en promedio 20 pesos más los hilos de colores, y lo mínimo que pide son 30 o 35 pesos a quienes se las ofrece.
Rosario Hernández quien está a punto de cumplir 80 años también se quejó de las falta de oportunidades para adultos mayores, “yo quisiera ir a los invernaderos de jitomate allá en Yurécuaro, pero ya estoy grande y no puedo agacharme con facilidad ni cargarme cosas pesadas, ojalá hubiera un trabajo para los adultos mayores, porque no tenemos oportunidades para laborar, pero seguimos comiendo y teniendo necesidades, por ejemplo yo tengo que tomar medicamentos y de las mismas ayudas junto para comprarlos cada mes”, relató.