El Arzobispo de León, Alfonso Cortés Contreras, calificó como “desmedida” la fuerza que ocupan los elementos de la Corporación Municipal de Policía con ciudadanos en las detenciones.
“Una fuerza desmedida que no es para guardar el orden y respetar a las personas. Yo creo que eso cualquier persona debemos respetar a los demás, poner el orden no significa violentar, se necesita cumplir la ley y respetando a las personas”, opinó el Arzobispo.
Tras la muerte del joven Eduardo Ojeda en la colonia Castillos Viejo a manos de un policía hace dos semanas y el abuso de autoridad que presuntamente sufrió otro joven en la colonia Lomas de Medina
“Cualquier tipo de violencia que dañe la dignidad de las personas siempre es así. Debemos exhortarnos todos, porque podemos ser violentos con las palabras y no actuar como debemos, se debe actuar con justicia y se debe de actuar con la dignidad de todo ser humano”, agregó monseñor.
Ven incremento en adicciones
Aunque hay jóvenes en grupos juveniles, el problema de adicciones y sobre todo el vicio del alcohol ha crecido, dijo el Arzobispo Alfonso Cortés.
“Es un tema que preocupa a nivel social todo lo que es el alcoholismo, las drogas , todo eso es fruto también de la falta de educación, la falta de justicia, de una sociedad interesada los unos con los otros y yo creo que cualquier vicio y adicción destruye a la persona a la familia, destruye la dignidad personal porque se pierde la capacidad de trabajo”, señaló el arzobispo.
Al menos en León hasta 2010 se estima que hay 770 pandillas con 20 mil integrantes.
Cortés Contreras contó que los grupos juveniles buscan acercarse a este tipo pandillas y ayudarles a no caer en adicciones y que este sector es prioridad en atención para las parroquias.