El periódico USA Today, el tercero de mayor circulación de Estados Unidos, y que, por primera vez en sus 34 años de historia, tomó posición por un candidato presidencial demócrata, este miércoles pasado puso en su portada que Trump carece de la honestidad y firmeza para el cargo de presidente y pidió a sus lectores de plano no votar por Trump.
Este periódico lo consideró: “sin el temperamento, la preparación, la firmeza y la honestidad que se necesita para desempeñar el rol de presidente”. Y dijo enfáticamente que es un mentiroso compulsivo y “mentiroso en serie”. El diario republicano San Diego Unión Tribune nunca, en sus 148 años de historia había apoyado a un candidato demócrata hasta ahora, donde pide votar por Hillary Clinton. Y alertó a sus lectores sobre el peligro de votar por Trump comparándolo con la ex presidenta de Argentina Cristina Kirchner alertando que puede “sacar a la nación de su curso como ella”. Y abundó: “Líderes terribles pueden sacar a las naciones de su curso. Venezuela se está cayendo a pedazos por la obstinación y delirios de Hugo Chávez y su sucesor…Trump puede ser nuestro Chávez, nuestra Kirchner. No podemos tomar ese riesgo”.
Y casi todos los periódicos de Estados Unidos, incluyendo el New York Times, piden no votar por Trump por considerar: “que ha apelado a la intolerancia y la xenofobia” y ha generado resentimiento “contra los mexicanos, musulmanes e inmigrantes”. El Arizona Republic, un influyente diario republicano, anunció su respaldo a Hillary Clinton. Desde su fundación en 1890, nunca había apoyado a un candidato demócrata. Lo mismo sucedió con el Dallas Morning News de Texas, y el Cincinnaty Enquirer de Ohio. Y otros periódicos conservadores y republicanos que tradicionalmente apoyaban a los candidatos republicanos, le retiraron no solamente su apoyo, sino que abiertamente instan a votar por la candidata demócrata o por otro partido, menos por este “loco”.
Nunca, en mis más de 35 años que tengo escribiendo, me había ocupado de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, pero ahora lo hago por la gravedad que representa que este individuo desquiciado y loco pueda ser el presidente del país más poderoso del mundo. El riesgo para México es enorme no solamente por el muro que quiere construir a costa de nosotros, sino por la xenofobia que nos tiene, el racismo, el odio que destila y toda la perversidad de que es capaz. Es un verdadero desquiciado, el jueves pasado a las 5 y cuarto de la mañana se puso como loco a lanzar innumerables twiters en contra de Alicia Machado la ex miss universo venezolana de quien dijo que “vieran un video de ella muy sucio”. Como se recordará, en el debate entre Hillary Clinton y Trump del lunes pasado, la primera se refirió a Alicia diciendo que Trump la había tratado como “miss peggy” en forma despectiva por estar con sobrepeso. Y con esto Hillary exhibió a Trump como misógino, racista y enemigo de los latinos e hispanos.
Recientemente se han revelado numerosos casos de racismo de Trump de los empleados latinos y del mal trato que tiene con sus empleados. Adicionalmente no quiere manifestar sus ingresos y hay evidencia de la evasión fiscal que realiza metódicamente y de sus “miles de demandas de todo tipo” que tiene según afirma el periódico USA Today. Todo esto da una idea de su inestabilidad emocional, paranoia y esquizofrenia que tiene. Un loco así al frente de la presidencia de la primera potencia mundial, puede llevar al mundo a una catástrofe económica y hasta nuclear. No entiendo como hay latinos que apoyan a Trump, en contra de su propia raza. Quizá precisamente por esto, porque quieren parecer “gringos” y reniegan de su procedencia. Este complejo de superioridad e inferioridad los hace apoyar a este loco, al que por todos los medios hay que evitar que llegue a la Casa Blanca.
En nuestro país, el único que lo apoya es el presidente Peña Nieto. Esa venida de él, exhibió a Peña como un tonto que no tiene la estatura política para ser presidente. Y, además, yo afirmo que es traidor a la patria porque relanzó la candidatura de Trump y lo ayudó a posicionarse y subir en las encuestas. Quien ayuda a los enemigos de la nación, es ni más ni menos que traidor a la patria. Y Peña no tiene los pantalones para reconocer su patético error y pedirnos disculpas a los mexicanos que nos sentimos agraviados por esa estúpida invitación a Trump. Este va a ser su cadalso político de Peña.