Terrence y Lubezki vuelven a los cines

El cinefotógrafo mexicano Emmanuel “Chivo” Lubezki, aseguró que el filme “Deberás amar” apuesta por un cine espiritual, en el que se evitan las escenas dramáticas convencionales para crear una rica experiencia sensorial, como un arte que tiene su propia manera de expresar ideas y emociones.
La película, que próximamente llegará a los cines de la ciudad, es la tercera colaboración de Lubezki con el estadounidense Terrence Malik, con quien trabajó en “El nuevo mundo” (2005) y “El árbol de la vida” (2011), esta última premiada con la Palma de Oro en Cannes 2011.
Sobre su trabajo en el filme, el director de fotografía explicó en entrevista a The American Society of Cinematographers que cada colaboración con Malik ha sido diferente y en este caso buscaban una forma de usar el lenguaje cinematográfico que era menos conectado con el teatro y la literatura y otras manifestaciones artísticas.
“Buscamos esos efímeros momentos, y esos fueron los que se plasmaron en el filme, la clave para ello es reaccionar rápido a un momento inesperado ya sea en las interpretaciones o en el clima”, explicó.
Recordó que Malik lo llamó para decirle que tenía un nuevo proyecto, y que quería hacerlo con el mismo equipo de “El árbol de la vida”, así que le envió un resumen general de lo que era la película y tuvieron una reunión para hablar sobre el significado de la historia para él y cómo quería rodar la película.
En el filme, el manejo de la luz tiene un papel fundamental, “lo que queríamos capturar sólo puede ser capturado accidentalmente como ocurre enfrente de nosotros. Así que se preparó de una manera muy poco convencional. Terry quiere esta forma de arte que tiene su propia manera de expresar ideas y emociones, y eso es lo que fue muy emocionante de la película”.
“Deberás amar” es una historia de amor en la que el protagonista, “Neil” (Ben Affleck), recorre toda la gama de los estados románticos en sus relaciones con “Marina” (Olga Kurylenko) y “Jane” (Rachel McAdams), y la cámara de Lubezki encuentra obviedades visuales elocuentes de las luchas internas de los personajes.