Michael Fine, un respetado abogado de divorcios de la ciudad de Sheffield, Estados Unidos, fue sentenciado a 12 años de prisión por aplicar una técnica de hipnosis a seis mujeres a las que también pudo haber abusado sexualmente.
“Cada vez que mencione la palabra ‘placer’, no podrás contenerte o cohibirte, tu cuerpo entero es un recipiente de placer”, “¿Cuándo fue la última vez que hiciste el amor?”, “Cada vez que te toque, va a ser una sensación increíble”, “A la cuenta de tres no vas a ser capaz de controlarte a ti misma”, mencionaba el abogado en sus consultas.
En noviembre de 2014, una mujer grabó con una cámara oculta su visita a la oficina Michael Fine.
Lo hizo después de que denunciara ante la Policía un posible abuso de este, pues aseguraba no recordar una parte de su última visita a la oficina del letrado y de haber encontrado su vestimenta desarreglada.
Después de varios minutos, la mujer se levanta del trance y el abogado continúa su conversación con total normalidad. En esos momentos los agentes de la Policía local irrumpen en la oficina y detienen al sospechoso.
La juez lo declararó culpable de aplicar una técnica similar en contra de seis mujeres distintas.