El Hospital Universitario de La Candelaria ha informado que alrededor del 30% de los niños de entre 6 meses y 5 años tienen problemas para dormir. Este padecimiento se habría presentado en personas de mayor edad y sorprende el descubrimiento en menores.
Por lo que se prevé que sean provocados por terrores nocturnos, ronquidos o sonambulismo. Este padecimiento en esta etapa de vida afecta la calidad del descanso, provocando en los niños irritabilidad, hiperactividad, mal humor diurno o bien dependencia a sus padres, entre otros.
Cuando un menor sufre esta falta de descanso, como primer paso sería llevarlo al médico para que diagnostique la gravedad del padecimiento.
O bien si el problema es mayor, la unidad de patología del sueño es la encargada de diagnosticar y aplicar pruebas para disminuir el padecimiento.