Dolor de cabeza, mareo, fatiga, comezón, acidez en el estómago. Esos son algunos síntomas que le describes a tu médico cuando te sientes muy mal, pero cuando la encargada de curar tus males es tu abuelita, los términos son muy distintos y en muchas ocasiones, más atinados que aquellos utilizados en la medicina convencional.
Ella entenderá perfectamente que andas muy “madreado/madreada” por la chamba o que no puedes pararte del sillón porque te dio “el mal del puerco”.
No solo detectará los síntomas de inmediato, te dará el remedio más efectivo para acabar con tu padecimiento.
Decidimos darle una mano a los médicos y creamos este muy breve diccionario de términos que usamos los mexicanos para describir nuestros problemas de salud
Achicopalamiento: Profundo desánimo o tristeza causado por una gran decepción o pérdida.
Síntomas: llanto, fatiga, propensión a ingerir alimentos calóricos en grandes cantidades y/o interpretar canciones de desamor o venganza.
Airits: malestar estomacal causado por la exposición de la persona al aire libre después de ingerir alimentos.
Síntomas: Inflamación, gases, agruras, dificultad para caminar, sudoración excesiva.
Bajoneo o bajón: fatiga que surge después de un episodio de euforia producido por la ingesta de alcohol.
Síntomas: enrojecimiento de los ojos, cabeceo, poca o nula movilidad, dificultad al hablar y sopor repentino con fuertes ronquidos.
Síndrome de chamarreo: estado constante de entorpecimiento o atolondramiento.
Síntomas: motricidad atrofiada, tendencia a las caídas, estrellamientos o derramamiento de líquidos sobre mesas o prendas ajenas.
Chamusqueada: quemadura severa provocada por pasar muchas horas bajo el sol.
Síntomas: enrojecimiento cutáneo, tensión muscular, quejidos constantes.
Chipilismo: depresión causada normalmente por el distanciamiento de un ser querido.
Síntomas: llanto y una tendencia a hablar del causante del padecimiento por largos periodos.
Chiripiorca: ataque nervioso causado por un alto nivel de frustración.
Síntomas: espasmos o tics en los párpados, movimientos bruscos de brazos y/o piernas, enunciamiento de palabras altisonantes.
Correlequetealcanza: incontinencia o diarrea
Síntomas: contracciones en las piernas, retortijones en el área pélvica y desplazamientos del punto de origen al sanitario a gran velocidad.
Desconchabadez: inmovilización de alguna extremidad causada por un golpe severo.
Síntomas: inflamación, moretones y en ocasiones, sangrado leve o llanto.
Desguanzamiento: severo debilitamiento del cuerpo.
Síntomas: fatiga inmovilidad muscular y resistencia a realizar tareas de mantenimiento o limpieza del hogar.
Empache: semiparálisis corporal causada por el exceso de comida.
Síntomas: dolor estomacal, dificultad al hablar, inmovilidad muscular, fatiga y gases
Síndrome de Jesús en la boca: alteración del sistema nervioso provocado por una gran preocupación.
Síntomas: sudoración fría, tensión muscular, dificultad para respirar y una propensión al chantaje emocional.
Madreaditis: agotamiento físico y mental provocado por el trabajo o la recreación excesiva.
Síntomas: dolor muscular, somnolencia, aumento del apetito y la sed, inhabilidad para cumplir con obligaciones familiares.
Mimisqui: episodio de histeria leve.
Síntomas: tendencia a gritar, patalear y mover la cabeza con desenfreno y en casos graves, desmayo.
Ñañara: fobia o repugnacia a algo o a alguien.
Síntomas: tensión muscular, aceleración del ritmo cardiaco, dilatación de las pupilas, escalofríos y en casos severos, náusea.
Mal del puerco: somnolencia causada por la ingesta de comida con alto grado calórico.
Síntomas: somnolencia y en ocasiones, gases.
Supiritaco: estado de parálisis ocasionado por un susto.
Síntomas: dificultad al hablar, tensión muscular, aceleración del ritmo cardiaco, propensión a la exageración y al dramatismo.
Otros nombres: patatús, soponcio, tramafat