Paulina Valtierra, psicóloga del DIF Municipal habló de cómo evitar situaciones difíciles con los hijos, consejos y de cómo afecta a los pequeños situaciones tan graves como las que algunos han vivido.
Explicó que primero se debe analizar al chico agresor (hablando de manera general), ver qué fue lo que lo llevó a tal acto, como es la relación en su familia, si consume algún tipo de sustancia o si tiene algún tipo de trastorno.
“Es una situación que lamentablemente es “común” pero el verdadero problema es encontrar la raíz de esto; la familia es la base de la sociedad, si un chico empieza a tener conductas de violencia, hacia animales, ya sean pajaros, perros, gatos o cualquiera, incluso con personas más pequeñas, es un foco de alerta, ver por qué está haciendo estos casos, puede ser que en su casa exista agresión o es una manera de llamar la atención, es vital detectar estas señales”, explicó la psicóloga.
Otra de las bases es la comunicación, a veces los niños no se acercan a preguntar o decir algo que les pasó por miedo a ser regañados, acusados o no ser creídos, lo importante es escucharlos, no juzgarlos y sobre todo, invitarlos a que tengan esa confianza, en el tema que sea; puede ser temas de violencia (bullying), acoso, higiene, escolares, familiares o cualquier tipo, lo importante es que deben ser escuchados.
“la base de la sociedad es la familia, y los niños son el reflejo de la familia, si los niños actúan de alguna manera “rara” es cuestión de ver como esta la familia, por eso invito a las personas a que acudan a los programas que ofrece el DIF.
“Por si en su casa o conocen a alguien que tenga problemas de acoso, violencia, o o que sea, aquí serán apoyados, y lo más importante es escuchar a los hijos, verlos cómo actúan, cómo se desarrollan, no juzgarlos y explicar con cuidado temas delicados como la sexualidad, que tu cuerpo es sagrado y no debe ser tocado por nadie, ni familiares, ni maestros, ni amigos, todo esto es prevenible si se actúa con tiempo, asistiendo a charlas, conferencias y estar atentos a los focos de alarma”, finalizó.
Si ya se vivió un acontecimiento desagradable lo importante es acudir a ayuda psicológica, para que con los tratamientos adecuados, la persona afectada pueda tener una vida normal, pueda desarrollar esa confianza en sí mismo, en la sociedad y en el sexo contrario, además de superar el trauma y salir adelante.