La historia del Club León tiene una sombra que no se despeja: la disputa por la propiedad del estadio.
Del enojo social y los vericuetos jurídicos am da puntual seguimiento hace años.
El Municipio de León pelea hoy su última carta en una revisión a su solicitud de amparo por la Suprema Corte de Justicia para no entregar el Estadio León al Club Social y Deportivo A.C. representado por Héctor González González y Roberto Zermeño Reyes, quienes ya ganaron el partido legal por marcador de 3 goles a 0 en las tres instancias judiciales en las que jugaron.
El emblemático escenario fue inaugurado el 1 de marzo de 1967 y fue sede mundialista en 1970 y 1986.
El reclamo social es que el inmueble se construyó con la aportación pública de Gobierno del Estado y de los dueños de palcos y plateas, que los particulares no tienen derechos, pero los jueces no lo ven así. En el año 2000 se creó un fideicomiso en el que Roberto Zermeño Vargas externó públicamente que era su intención entregar la propiedad al Municipio (a cambio recibiría 10 mil 359 metros aledaños y el uso de suelo comercial). Pero luego reclamaría que el fideicomiso concluyó su vigencia y lo quiere de regreso.