Antes de pretender cubrir las listas de útiles escolares, padres de familia se ven obligados a desembolsar de 100 a 500 pesos en cuotas “voluntarias” que permitan la reinscripción de sus hijos a varias escuelas públicas de León.
En el recién concluido ciclo escolar 2016-2017, la Dirección de Estadística Educativa estima un total de 160 mil 705 alumnos cursando alguno de los seis grados de primaria. De ellos, 127 mil 164 la asisten a alguna de las 350 instituciones de gobierno que hay en el municipio.
Y aunque se supone que la educación pública es gratuita, miles de papás se quejan porque muchos planteles condicionan la inscripción o reinscripción a un pago obligatorio.
Muchos se declaran contra las cuotas. Algunos de ellos, a pesar de su inconformidad, liquidan las cooperaciones, aunque otros se niegan a hacerlo a pesar de que en ocasiones los niños se ven excluidos de actividades o de evaluaciones.
“Ya tengo dos años que no he pagado tampoco (…) hay veces que supuestamente no les quieren hacer el examen, pero ya de tanto y tanto sí se los dan.”, comentó Manuel Delgado, padre de familia.
Sin embargo, también existen numerosos casos en que los papás no poseen ingresos suficientes para cubrir de manera sencilla estas cooperaciones escolares.
Uno de ellos es el de Mireya Maximino, quien como comerciante ambulante y mamá de seis hijos se ve forzada a pagar una cuota de 400 pesos por la educación preescolar en el kinder Federico Froebel, 300 pesos en la Telesecundaria 581 y 200 pesos por tres de sus hijos alumnos en la primaria Paulo Freire.
Aunque la señora Maximino cuenta con el apoyo del programa federal “Prospera”, la suma de éste al salario de mil 500 pesos semanales de su esposo y a sus inestables ingresos de 30 a 80 pesos diarios, se ve rebasado por el pago de las cuotas y la compra de útiles y uniformes escolares que calcula en 800 pesos por niño.
“No es justo la cuota, dicen que es gratis, pero cuál gratis si están cobrando la cuota (…) es que sí está feo así, ahorita está difícil, está muy difícil, porque yo sí estoy pagando la primaria, kínder, secundaria y la prepa, ¿de dónde voy a agarrar tanto dinero?”, externó.
Apoyan cooperativas
Pero también hay padres de familia que se declaran a favor de las cooperaciones que las autoridades o mesas directivas de padres de familia solicitan.
Una de ellas, Teresa Ponce, tutora de una alumna inscrita a la primaria Cuauhtémoc, dijo estar de acuerdo con la cuota que le solicitan, pues asegura que se ve reflejada en las instalaciones, en la higiene y en la disciplina que imparten ahí.
Si bien, parte de los entrevistados comentó saber que estas sumas son destinadas al mantenimiento del inmueble, y por lo tanto, al beneficio de los niños, los directivos de las instituciones no estuvieron dispuestos a corroborar dicha declaración.
Apoyan cooperativas
Pero también hay padres de familia que se declaran a favor de las cooperaciones que las autoridades o mesas directivas de padres de familia solicitan.
Una de ellas, Teresa Ponce, tutora de una alumna inscrita a la primaria Cuauhtémoc, dijo estar de acuerdo con la cuota que le solicitan, pues asegura que se ve reflejada en las instalaciones, en la higiene y en la disciplina que imparten ahí.
Si bien, parte de los entrevistados comentó saber que estas sumas son destinadas al mantenimiento del inmueble, y por lo tanto, al beneficio de los niños, los directivos de las instituciones.
Rechaza SEG sea obligatorio
Por su parte, la encargada de Comunicación Social de la Delegación Regional de Educación, Rosalina Pedraza, aclara que las cuotas por ningún motivo deben ser condicionadas. Éstas son completamente voluntarias, fijadas por la Sociedad de Padres de Familia de cada escuela, y deben destinarse mantenimientos menores: actividades, papelería, eventos escolares.
Este apoyo voluntario, puede incluso no ser de manera económica, explica la representante, pues los padres que no estén en condiciones de dar una aportación económica, pueden apoyar al mantenimiento de la institución prestando sus servicios.
Por otra parte, la licenciada Pedraza explica que los mantenimientos mayores, como la construcción de nuevas aulas, la obtención de equipo, o los pagos básicos del inmueble como la luz y agua, son liquidados por parte de la Secretaría, de forma que no todo el financiamiento de la institución es cubierto por la cooperación de los padres de familia, como en ocasiones suele creerse.
De igual forma, la representante de la Secretaría invita a la ciudadanía a reportar a la Delegación todos aquellos casos en que consideren se les está obligando a pagar por un derecho que, como bien dice el artículo 3° de la Constitución, es gratuito, laico y obligatorio.