Bajo la filosofía de recuperar más y desechar menos, la arquitecta Mariana Morales, en conjunto con las diseñadoras María Rozada y Peque Quintana, decidió reutilizar materiales como la madera, la tela y el metal para emplearlos en la producción de muebles y piezas decorativas.
“Nuestra intención consiste en rescatar los elementos fuera de uso que muchas veces terminan por contaminar el medio ambiente. Entonces, tomamos objetos olvidados, les damos una función utilitaria y los vestimos con una nueva piel.
“Antes de intervenir un objeto, analizamos los colores, acabados y textiles que le van más ad hoc. En ocasiones retapizamos el mobiliario o pulimos la herrería. Los ensambles se hacen por medio de tornillos, clavos y soldaduras”, explicó Mariana Morales, representante de la firma Taller Re.
A través de pinturas y tejidos naturales, empaques reciclados y etiquetas de papel usado, las creativas promueven la conciencia ecológica.
Un par de esculturas con ruedas de fierro, un librero hecho con tablones de madera y un sofá con textura capitonada destacan entre los modelos protagónicos.
Vasos, jarras y floreros elaborados con botellas de vino, macetas con base de piedra y cuadros con cubiertos colgantes, son algunos de los accesorios más sobresalientes.
“El ambiente que proyectan los enseres es acogedor, relajado y con mucha personalidad”, agregó Morales. “Muchas veces, las personas consideran desperdicio lo que otras vemos como materia en potencia”, añadió Morales.
Nacional y ecológico
– Todos los muebles y accesorios están hechos en México de manera artesanal.
– El uso de productos locales disminuye la contaminación ocasionada por el traslado de materiales.
– La madera se pule con ceras naturales en lugar de barnices, que contienen sustancias tóxicas.