Pablo Pérez fue de los más afectados tras el ataque que sufrió el autobús de Boca Juniors previo a la final de vuelta de la Copa Libertadores; y todavía con las consecuencias de lo sucedido, el capitán xeneize fue claro: “Yo no puedo ir a una cancha donde puedo llegar a morir“.
Previo al partido de vuelta entre Boca Juniors y River Plate, éste correspondiente a la final del torneo continental, el autobús de Boca, el cuadro visitante, fue atacado en las inmediaciones del Monumental por un grupo de hinchas de River que lanzaron piedras y otros objetos a las ventanas. Casi todos los cristales del lado izquierdo se rompieron y, para dispersar al grupo, la policía lanzó gas pimienta que afectó a los jugadores.
Pérez fue de los más lastimados en el incidente, tanto, que no bien pudieron ponerse a salvo, fue traslado al Sanatorio Otamendi. Allí, el médico diagnosticó una “conjuntivitis química con erosión conjuntival inferior” en el ojo izquierdo.
Foto: Clarín Deportes
Al salir del sanatorio en el que ha sido atendido, el mediocampista argentino pidió un poco de cordura a la Conmebol que prácticamente lo quiso obligar a jugar el sábado, cuando aún no se determinaba la suspensión del duelo y su posterior reprogramación.
“Yo no puedo ir a una cancha donde puedo llegar a morir (…) Si me sacan el ojo no me lo paga nadie. Tengo tres hijas, mi señora. Mi hija mayor, cuando llegué a mi casa, estaba llorando. Lo de la Conmebol fue una vergüenza. Estaba en el hospital y me decían que tenía que jugar. Con el ojo irritado, hinchado… iba a entrar pero no se podía jugar”, señaló en la entrevista que que han publicado medios argentinos.
Pérez, en esta entrevista, aseguró la agresión no se dio muy lejos del estadio de River, declaración un tanto contraria a la del club Millonario que comentó que fue en calles muy lejanas.
“Se dedicaron a tirar piedras, botellas. Toda la gente estaba acumulada en un solo lugar. Fueron minutos que no se los deseo a nadie. Eran estallidos de vidrios constantemente. No fue muy lejos de la entrada al estadio, fue bastante cerca”, relató el capitán de Boca.