Una genialidad de Lionel Messi apareció en la recta final, con un soberbio pase de gol para que el Barcelona certificara un triunfo por 2-0 sobre el Villarreal, con lo cual recuperó provisionalmente la cima de la Liga de España, que celebra su jornada 14.
El joven canterano Carlos Aleñá, con una definición a la altura del pase que le prodigó Messi, firmó el 2-0 para sellar una victoria que se estaba complicando hasta antes de ese segundo tanto a los 87. El defensa Gerard Piqué marcó el primero con un certero cabezazo a un centro del francés Ousmane Dembélé a los 36.
Así, y tras el empate 1-1 con el que finalizó el duelo entre Alavés y Sevilla, el cuadro culé es el líder de la clasificación con 28 unidades. Sevilla, equipo que hasta antes de este duelo era el líder, se quedó en el segundo puesto con 27 unidades.
Los visitantes fueron los primeros en tocar la puerta con peligro. A los 12 minutos, Gerard Moreno realizó un remate en el área, ante una pegajosa marca del francés Clement Lenglet, y el esférico se estrelló en el poste.
El dominio blaugrana se hizo evidente en el marcador cuando Dembélé recibió un rebote por el sector derecho y envió un centro que Piqué mandó a las redes con un frentazo a los 36.
Messi hizo la jugada del encuentro en la recta final, con un pase al espacio y a la entrada de Aleñá en el área. Fue el gran chispazo del astro argentino, luego de lucir dolorido de la pierna derecha debido a una falta que recibió a los 15 minutos.
“Con él todo es más fácil. Fue un pase que sólo ve él; yo rompo para crear el espacio, pero la visión que tiene me la pone donde quiere y pues yo, uno contra uno, pude definirla”, dijo Aleñá sobre la asistencia del argentino y su propia definición.