Veintiún años han transcurrido desde que, en el cumplimiento de su deber, murieron los bomberos Fernando Ortiz Garrido y Arturo Hurtado Santos, así como el cabo Fernando Pedro Fernández Cruz, en Tulancingo.

A los tres, las llamas los alcanzaron mientras sofocaban un incendio forestal en el poblado Tepalcingo, a orillas de la carretera México-Tuxpan.

Este fin de semana, el gobierno municipal de Tulancingo realizó un homenaje a los bomberos caídos, con la presencia de sus familiares.

Primero hubo una misa, posteriormente, una guardia de honor en el Panteón San Miguel, donde fueron sepultados los tres integrantes de Protección Civil y Bomberos.

“El 16 de febrero de 1998 es un día que siempre estará presente en la memoria de los tulancinguenses, ya que los bomberos, a costa de su vida, evitaron que el incendio forestal llegara a una zona poblada”, mencionó la administración municipal.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *