Según los especialistas, las horas adecuadas para dormir son aproximadamente 7 y 9 horas, pero en ocasiones, el estrés o el trabajo provoca que sean menos horas de dormir.

El no descansar correctamente mientras se duerme, pone en riesgo la salud.

De acuerdo con información al portal de noticias Noticieros Televisa, la mayoría de las personas decide dormir hasta muy tarde los fines de semana compensando las pocas horas de sueño y descanso de la semana, pero de acuerdo con investigaciones, el dormir poco o dormir mal, puede desecnadenar enfermedades.

Científicos de la Universidad de Estocolmo realizaron en mayo de 2018, un reporte que se había estado investigando durante 13 años, la duración de 43,880 personas y los resultados arrojaron la posibilidad de experimentar muerte prematura.

Para el 2016, investigadores de la Universidad de Chicago, demostraron que la probabilidad de poder desarrollar diabetes es reducida en personas que duemen más el fin de semana que con los que descansan poco todas las noches.

En ambos estudios, se establece que el dormir mal afecta muchos aspectos, desde el estado de ánimo, la salud cardiovascular, sufrir un derrame cerebral e incluso, como ya se mencionó, la probabilidad de desarrollar diabetes 

Sufrir un derrame cerebral es una de laas consecuencias de dormir poco.

Por parte de la Universidad de Colorado en Boulder, descubrieron en un nuevo estudio, que el hecho de decidir dormir más tiempo en los fines de semana, también afecta la salud e incluso, la empeora.

Para llevar a cabo el estudio, los investigadores reclutaron a un grupo de adultos jóvenes que durmieron cinco horas durante nueve noches y los fines de semana, durmieron las horas que ellos quisieran, para retomar las cinco horas dormidas en la semana.

Los resultados arrojaron que las personas que dormían solamente cinco horas al día y aprovechaban para dormir más tiempo durante el fin de semana, aumentaron de peso y eran orillados a consumir más refrigerios después de la hora de cena debido a la ansiedad que provoca.

Dormir pocas horas genera ansiedad, lo que orilla a comer más de lo normal.

Esto se relacionó a que la falta de sueño, provoca que haya una disminución en la sensibilidad a la insulina, subiendo los niveles de glucosa en la sangre y reduciendo la capacidad del páncreas.

Y por su parte, el recuperar el fin de semana las horas de sueño perdidas, aumenta la capacidad de insulina y la del páncreas para poder responder a los aumentos de glucosa.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *