La revocación de mandato o referéndum revocatorio, es un procedimiento democrático por el cual los ciudadanos pueden cesar de su cargo público a un funcionario, antes del término de su periodo, mediante votación directa o por recolección de firmas, dependiendo de las dimensiones geográficas o poblacionales.

on el revocatorio los ciudadanos mandantes pueden dar por terminado el mandato que le han conferido a una autoridad electa. Su fundamento sería el principio de la libertad política de los ciudadanos de elegir y deponer a sus gobernantes en una democracia representativa. 

En un País con una enorme popularidad del presidente AMLO y su partido Morena con amplio dominio del Congreso, se acaba de aprobar el dictamen para modificar la Constitución e incluir la consulta popular y el referéndum. Es algo que exigía la sociedad hace mucho, es bueno, era necesario. Pero en un contexto de una oposición que teme que la aplanadora de Morena les pase de nuevo por encima en las elecciones intermedias del 2021, esta ley despierta alertas como lo clama la Coparmex-, por una posible reelección de AMLO.

Analicemos: la revocatoria del mandato es un mecanismo democrático, que permite a la ciudadanía remover a una autoridad electa antes del final del período establecido y que es indispensable cuando se dan gobernantes corruptos y traidores, pero que puede abrir la puerta a presidentes populares para su reelección. Es cierto que en gobiernos locales en el mundo el revocatorio existe; en países cercanos como Venezuela, Ecuador y Bolivia también se ha dado. Incluso en México, el Estado de Yucatán fue el primero en introducir la revocatoria en 1938 y en Chihuahua en 1997 aunque el mecanismo, que no se activó nunca, fue declarado inconstitucional. A pesar de estos precedentes, el revocatorio fue incluido posteriormente en los estados de Oaxaca (1998), Morelos (2011), Guerrero (2013), Zacatecas y Aguascalientes.

Con la advertencia de la oposición que se está abriendo “la antesala de la reelección” en México, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó este jueves en lo general con el voto aplastante de Morena, la reforma constitucional sobre Revocación de Mandato y Consulta Popular, con la cual se permitiría poner a votación la continuidad en el cargo del presidente de la República y de los gobernadores. La reforma fue impulsada por Morena y alcanzó la mayoría calificada teniendo en contra al PAN, al PRD y a Movimiento Ciudadano.

Como Consejero local del INE considero que es una buena iniciativa, pero entre los partidos políticos la reforma provoca discusiones pues permitiría al Presidente AMLO, estar en la boleta electoral en la elección de diputados federales de 2021 y esto, es cierto, causa inequidades. El dictamen señala que la revocación de mandato del Presidente de México podrá ser solicitada por él mismo, por el 33% de los legisladores en cualquiera de las dos cámaras, o por el 3% de los ciudadanos en la lista electoral, cosa que fácilmente se dará.

El dictamen se aprobará seguramente en el pleno y suena lógico que el revocatorio se incluya en la boleta electoral, lo que empujará nuevamente a los electores a mantener en el Congreso a Morena. Se reformarán ocho artículos de la Constitución; en las modificaciones al 116 y al 122 se quita el candado para que los gobernadores también sean sometidos a este ejercicio, pero sólo si su congreso modifica la Constitución local.

¿Tendrá en su mente AMLO reelegirse? Estoy seguro que no. Es cierto que ha gustado del poder que no han tenido los presidentes en los últimos 50 años. Pero ni la edad ni el contexto se lo permitiría. Las experiencias de países como Venezuela harían que México se dividiera enormemente en caso de que en el lejano 2023 se quisiera modificar la Constitución para eliminar el “sufragio efectivo no reelección” que es esencia de nuestra historia y que nos costó guerras. Lo que provocará, eso sí, la iniciativa aprobada esta semana, es el temor de la oposición de que el Presidente AMLO esté en campaña permanente por su partido y que su presencia en la boleta genere inequidades en la contienda. Lo primero nos toca a la sociedad de darse-, el cuestionarlo; lo segundo es lo que se dará con seguridad. Lo que sí veo imposible, sería usar esta nueva ley, para lanzar en el 2024, la posible reelección de AMLO.

* Director de la Universidad Meridiano
[email protected]

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *