Australia.- Un hombre sacó a pasear al perro de su jefe y durante lo que parecía un paseo tranquilo, hizo un descubrimiento extraordinario.

Según el diario Stuff, Michael Jonhston daba un paseo con el can, cuando encontró las huellas, de un ave de gran tamaño, por lo que se extrañó y supuso que se trataban de los rastros de un moa, un ave no voladora que medía 3.6 metros de altura y que se extinguió hace millones de años.

Tras el hallazgo, contactó a Kane Fleury un curador asistente de ciencia natural del Museo de Otago, quien confirmó que las huellas fueron dejadas por el especimen.

Las huellas fueron encontradas en una roca de un lago, por lo que sorprendió aún más que éstas se conservaran durante siglos.

Es definitivamente el punto culminante de mi carrera.Me quedé muy impresionado, cuando entré en el agua y vi cómo se conservaron esas huellas casi perfectamente… ya que es muy poco común ver huellas tan nítidas”, dijo el científico.

Fleury señaló que posiblemente los rastros quedaron al descubierto con el desbordamiento del río, ocurrido en noviembre pasado.
 

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