El Rastro Municipal de Cortazar abrió sus puertas después de ser inaccesible durante la Administración panista de Elías Ruiz, ya que sus asesores admitían que el rastro no estaba en condiciones de ser ventilado.
El actual director del rastro, Juan Ignacio González, abrió las puertas del inmueble y agregó que en efecto, la anterior Administración les había dejado “un cochinero”, pero que ahora las cosas cambiaron para beneficio de todos.
“El rastro está cambiando por varias razones, porque los que se fueron nos dejaron un verdadero cochinero, pero ahora hacemos limpieza profunda y no permitimos que haya anomalías de ninguna clase”, aseguró Juan Ignacio González.
El rastro tiene ahora como norma la prohibición de entrada de animales que lleguen sin marca de registro, enfermos, moribundos o sin permisos legales, ya que el proceso se ha reiniciado para que todo sea legal.
“Nos preocupa que no haya maltrato hacia los animales, y por ello buscamos que todo se haga con la normatividad para evitar sufrimiento innecesario para ganado bovino y porcino que aquí se sacrifica y además, no tenemos nada que esconder”, aseguró Juan Ignacio González.
De las casi 30 personas que laboran en el rastro, muchas ya tienen antigüedad, y algunos admitieron que el cambio ha sido en beneficio para el mismo lugar ya que incluso ahora, las reses que son desolladas ya no tocan el piso.
Muestran estado del rastro
El Rastro Municipal de Cortazar abrió sus puertas después de ser inaccesible durante la Administración panista de Elías Ruiz, ya que sus asesores admi