Australia.- Stuart McKenzie, un experto cazador de serpientes, fue llamado para capturar una gran serpiente pitón que fue hallada en el jardín de una casa, y al acudir y revisarla, se dio cuenta de que el animal se acababa de tragar un gato.
De acuerdo a la información que el mismo McKenzie publicó en la página de Facebook de su empresa, Sunshine Coast Snake Catchers, todo ocurrió este lunes seis de enero, en la localidad de Sunshine Coast, en Queensland, Australia.
McKenzie acudió a un hogar luego de ser alertado de que había una gran serpiente durmiendo en el jardín. Al llegar, notó que su vientre estaba muy abultado, por lo que acababa de comer algo grande, lo que de inmediato puso al experto a sospechar.
Sabía que lo que se había comido era demasiado grande para ser una zarigüeya, y estaba un 95 por ciento seguro de que era un gato”, aseguró.
Tras capturar a la serpiente, McKenzie la llevó al veterinario, donde la escanearon en busca de un chip. Finalmente dieron con el dispositivo que estaba implantado en el gato, obtuvieron los datos de sus dueños y los llamaron para darles la noticia.
La familia después explicó que el gato pasaba las noches en su hogar, pero que en el día se iba y exploraba el vecindario a sus anchas. Por lo menos así fue hasta que se topó con la serpiente a unas cuadras de su casa.
McKenzie advirtió a los dueños de gatos que no los dejen salir del hogar sin supervisión, pues además de que pueden ser cazados por otros animales más grandes, también pueden cazar especímenes más pequeños y alterar la fauna local.
Por último reveló que la serpiente fue puesta en libertad en un campo alejado de la mancha urbana de la ciudad.