CDMX. Juan Luis Díaz y su esposa ese día no quisieron usar la camioneta y prefirieron tomar el metro, pero al regresar nunca imaginaron que sería su último viaje juntos pues fueron 2 de las 25 víctimas que murieron al desplomarse la línea 12 de la estación Olivos.
Familiares de la pareja fueron quienes dieron a conocer como habían estado los hechos, pues el matrimonio no acostumbraban a viajar en metro pero ese día lo hicieron con la finalidad de ahorrar gasolina, pero ya no llegaron a casa.
José Luis murió en el accidente junto a su esposa y dos días después sus cuerpos fueron entregados a sus familiares, quienes los velaron y hoy en día lo sepultaron.

“Lamentablemente, porque no era muy habitual que se subiese al Metro, no era como que siempre usara este tipo de transporte”, dio a conocer su hijo Luis Diaz en una entrevista para el portal de NoticierosTelevisa.com.
No podían creer los hechos
Tanto su hijo, como mamá de José Luis afirmaron que él y su esposa no merecían morir así, eran un gran matrimonio y entregados a sus hijos familia.
Le gustaba salir a pasear, jugar con su hijo, era muy trabajador muy responsable más que nada, el casi no faltaba a su trabajo, como estuviera se iba”, comentó Lucia Galicia, mamá Juan Luis.
Los familiares los recuerdan como grandes padres y en su funeral estuvieron acompañados por decenas de amigos y conocidos, quienes no podían creer que ellos iban en el metro que se desplomó.
Su sepelio fue un encuentro de emociones, donde su hijo y la mamá de Juan Luis saben que serán recordados como grandes humanos.