Portugal sólo necesitó meter el primer gol para encarrilarse e iniciar la Eurocopa con una victoria, y si bien el marcador de 3-0 parece contundente y muy abultado, la realidad es que Hungría vendió cara la derrota.
El platillo fuerte era el duelo entre Francia y Alemania, pero lusitanos y húngaros no decepcionaron y pusieron la vara muy alta con el buen partido que protagonizaron en Budapest. Intenso, cerrado y con tres goles en los últimos minutos que le dieron al equipo de Cristiano Ronaldo sus primeros tres puntos del certamen.
Con la banda de capitán en el brazo, el delantero de la Juventus cargó al equipo en sus hombros y lo guió a su primera victoria ante una escuadra húngara que se encerró en todo el primer tiempo, desesperó a su rival por poco y se sale con la suya.
Los primeros 45 minutos fueron para los de Fernando Santos, sin embargo, Hungría estuvo siempre bien parada en la zaga y, con un buen desempeño del arquero Péter Gulácsi, mantuvieron a raya a los portugueses.
La desesperación cundió entre los lusitanos que no encontraban la forma de inaugurar el tanteador que, con el 0-0, beneficiaba totalmente a Hungría en el “grupo de la muerte” y le permitiría sumar un punto en su debut.
Al 79″, el Estadio Ferenc Puskás explotó con la anotación de Szabolcs Schön que acaba de ingresar a la cancha, sin embargo, el abanderado señaló un fuera de lugar que terminó por anular el gol.
El desconcierto húngaro abrió la puerta para los lusitanos y, en una jugada en la que la suerte estuvo involucrada, por fin inclinaron la balanza a su favor con la anotación de Raphäel Guerrero.
En jugada por derecha, Rafa Silva metió un centro al área que rebotó en Attila Szalai, Guerrero recuperó la pelota y disparó al arco. El balón pegó en Willi Orban y terminó colándose al arco.
Orban sin duda tendrá pesadillas este martes, pues además de desviar el balón que provocó el primer gol de Portugal, minutos después, cometió el penal que significó el 2-0 parcial y el primer gol del “Comandante” en la edición 2020 de la Eurocopa.
Ronaldo lo cobró con el sello de la casa, con potencia y muy buena colocación engañando al arquero que no pudo hacer nada. El preámbulo perfecto para lo que se vio después, un poema de gol que le dio el triunfo a Portugal.
De nuevo por derecha, Renato Sanches cedió a Ronaldo que en los linderos del área, hizo la pared con Silva, amagó al portero y concretó el 3-0 con una definición perfecta que les permitió colocarse en la cima del Grupo F.